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Sistema Imperial en Todo El Mundo

El documento describe el sistema imperial de medidas, incluyendo unidades como pulgadas, pies y yardas para longitud, y libras y onzas para peso. Explica que este sistema se originó en Inglaterra y fue reemplazado en la mayoría de países por el sistema métrico. También lista a los cuatro integrantes del grupo: Ivette Chavarry Diaz, Ayelén Zaquinaula Alberca, Roque García y Brayan Tineo Zapata.

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Sistema Imperial en Todo El Mundo

El documento describe el sistema imperial de medidas, incluyendo unidades como pulgadas, pies y yardas para longitud, y libras y onzas para peso. Explica que este sistema se originó en Inglaterra y fue reemplazado en la mayoría de países por el sistema métrico. También lista a los cuatro integrantes del grupo: Ivette Chavarry Diaz, Ayelén Zaquinaula Alberca, Roque García y Brayan Tineo Zapata.

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INTEGRANTES:

1. Ivette Chavarry Diaz.


2. Ayelén Zaquinaula Alberca.
3. Roque García.
4. Brayan Tineo Zapata.

SISTEMA IMPERIAL
Este sistema se deriva de la evolución de las unidades locales a través de los siglos y de los
intentos de estandarización en Inglaterra. Las unidades mismas tienen sus orígenes en la
antigua Roma. Hoy en día, estas unidades van siendo lentamente reemplazadas por el Sistema
Internacional de Unidades, aunque en Estados Unidos la inercia del antiguo sistema y el alto
costo de migración ha impedido en gran medida el cambio.

Un sistema de pesos y medidas originalmente desarrollado en Inglaterra. Similar pero no


siempre lo mismo que las unidades estándar de los Estados Unidos.

Ejemplo de medidas Imperiales:

Longitud: pulgadas, pies, yardas

Área: pie cuadrado, acres

Peso: Libras, onzas,

Volumen: onzas líquidas, galones

El Sistema Imperial ha sido reemplazado por el sistema métrico en la mayoría de países,


incluyendo Inglaterra.
Se dije que el proceso de colonización puede ser de carácter político, militar, cultural,
económico o presentar otras manifestaciones, así como desarrollarse de forma violenta o
pacífica.

Las potencias colonizadoras establecieron tres formas fundamentales de dominio:

Las colonias: estaban sometidas a la soberanía de la potencia colonizadora y eran


administradas por ella. Esta fórmula implica un control político por parte de la metrópoli:
supone la anexión territorial y la pérdida de la soberanía del país colonizado. Un ejemplo fue el
Congo Belga, la Colonia británica de El Cabo, Argelia (Francia) o las colonias de poblamiento de
Australia o Canadá.

Las concesiones: con la concesión las potencias colonizadoras obtenían ventajas comerciales
de países que eran independientes y que les cedían una serie de puertos en calidad de puertos
francos. Esto ocurrió en China.

El protectorado: en este caso la potencia protectora controlaba la política exterior y las


riquezas del país, mientras que las autoridades nativas controlaban la política interior. Fue el
caso de Gran Bretaña sobre Egipto o el de España y Francia sobre Marruecos.

Las consecuencias de la colonización fueron bien distintas según quién cuente la historia, si son
los pueblos europeos o si son los pueblos sometidos. Para los pueblos colonizados:

Demográficas: Entre estas habría que citar el incremento de la población en los países
ocupados debido a la erradicación de epidemias y la consiguiente reducción de la mortandad a
causa de las medicinas llevadas por los europeos. como consecuencia de la importación de
enfermedades desconocidas (viruela, gripe, etc.)

Económicas: La agricultura autosuficiente y de policultivo fue sustituida por otra de


exportación, en régimen de monocultivo, ocasionando la desaparición de las formas
ancestrales de producción y la extensión de cultivos como el del café, cacao, caucho té o caña
de azúcar.

Sociales: la burguesía procedente de las metrópolis, integrada por comerciantes, funcionarios


y terratenientes, copó los niveles altos y medios de la sociedad colonial. Solo un pequeño
grupo social autóctono pasó a formar parte de la cúspide social.
Políticas: las colonias estuvieron sometidas, en mayor o menor grado a la dependencia
impuesta de la metrópoli.

Culturales: El descenso del analfabetismo y la imposición de la cultura occidental; esto


conllevó la desaparición de la estructura tribal de esas sociedades e incluso en algunos casos la
pérdida de su identidad cultural al destruir las lenguas y culturas autóctonas.

Es un proceso histórico muy complejo, pero podríamos describirlo como el proceso a través
del cual, estados poderosos someten a pueblos más débiles para satisfacer ciertos
intereses. Dentro de esta acepción podríamos identificar distintos procesos similares en
momentos muy diferentes de la historia, pero aquí nos abocaremos al llamado Imperialismo
Moderno del siglo XIX.

Desde 1870 –aproximadamente- hasta 1919 (tras el fin de la Primera Guerra Mundial) se da lo
que algunos historiadores han llamado la “Era del Imperialismo”. Este período está
caracterizado por una intensa expansión colonial en la que los países más poderosos salen a
dominar territorialmente enormes regiones dando origen a grandes imperios coloniales.

El imperialismo implicó no sólo una expansión comercial y nuevas fuentes de recursos para las
potencias colonizadoras, sino además, dominio político, ocupación militar y una explotación
sistemática de las colonias, las cuales perdieron totalmente su soberanía. Hoy en día existe la
tendencia a definir el periodo imperialista como una forma de expansión económica que
prácticamente se había convertido en una necesidad, sobre todo en el último tercio del siglo
XIX, un proceso de expansión al que se denominó Imperialismo Librecambista.

UNA NACIÓN DOMINARÁ A LAS OTRAS

El Imperialismo defiende que una nación pueda dominar a otra imponiendo sus propios
criterios, normas y haciéndose con el control absoluto incluyendo sus medios de producción.

EL USO DE LA FUERZA:

Se justifica el uso de la fuerza para conseguir ese control si fuese necesario recurrir a la
violencia incluso. Todo vale para el sometimiento de los estados.
MEDIOS DE PRODUCCIÓN CONTROLADOS:

Las potencias imperialistas pueden controlar los medios de producción de los estados
sometidos.

CONTROL MILITAR:

El territorio dominado estará controlado por los militares, quienes asegurarán que se cumplen
las expectativas y exigencias del Imperio.

CONTROL POLICIAL:

No solo el ejército, sino también la policía estará presente controlando el territorio,


imponiendo el miedo, el orden y dejando en evidencia que la libertad está restringida.

El imperio británico fue el más poderoso y extendido del mundo, llegando a abarcar en las
primeras décadas del siglo XX una cuarta parte de la población mundial y una quinta parte de
los territorios del planeta.

Francia, Alemania, Italia y Rusia se lanzaron también a la conquista de colonias. Pero no sólo
las potencias europeas intervinieron en el Imperialismo colonizador de fines del siglo XIX, sino
que Estados Unidos y Japón también se lanzaron en la búsqueda de nuevas conquistas.

Hacia 1880 se había desatado una gran rapiña entre los países imperialistas para repartirse
África, o para ser más precisos, para completar el reparto, pues Inglaterra y Francia la habían
comenzado tiempo atrás. Las ocupaciones dieron lugar a continuos enfrentamientos entre
ellas, como el de Francia e Inglaterra por Egipto o el de Francia e Italia por Túnez.

Pero el problema del Congo fue lo que motivó a convocar a los países europeos a reglamentar
las ocupaciones, la finalidad fundamental era establecer la libertad de navegación y comercio
porque las metrópolis impedían que otros comerciaran con sus colonias
A iniciativa del canciller alemán Bismark, quien buscaba protagonismo en la repartición, se
llevaron a cabo en la ciudad de Berlín dos reuniones, una en noviembre de 1884 y otra en
febrero de 1885. Acudieron representantes de las grandes potencias, las de segundo orden y
hasta las que habían dejado de serlo, en total asistieron 14 Estados.
Alevosamente, ningún representante africano participó en la reunión, situación que revelaba
las verdaderas intenciones de la colonización africana si se considera que algunos de los
objetivos, según los europeos los más meritorios eran civilizar a los africanos, enseñarles a vivir
en paz y disfrutar de todas las bondades de la civilización occidental.
Uno de los acuerdos fue que las potencias se comprometieron a notificar cualquier anexión, la
cual sería legal siempre y cuando se hiciera en zonas no ocupadas por otros europeos, además
el territorio anexado debía ocuparse efectivamente para legitimar la posesión, dejando sin
efecto los tratados previos hechos con los jefes locales. El gran beneficiario de la reunión fue
Leopoldo II a quien se le asignó, como ya hemos mencionado, a título personal el Congo. Las
negociaciones no estuvieron exentas de confrontaciones pues enfrentaban los intereses de
países muy poderosos, las dos grandes potencias –Inglaterra y Francia- protegiendo sus
posesiones y cuidando que el contrario no le superara, y el resto buscando conseguir una
colonia por primera vez o ampliar sus pequeñas posesiones.
Una vez concluida la Conferencia los enfrentamientos continuaron por lo que los países
tuvieron que establecer entre ellos una serie de tratados para delimitar las fronteras, por
ejemplo, Inglaterra firmó 30 con Portugal, 25 con Alemania y 149 con Francia (Ferro, 2000:
109), era evidente que los acuerdos de la Conferencia no habían logrado resolver las disputas
territoriales, pero habían servido para que las potencias midieran sus fuerzas y construyeran
sus alianzas con miras a posibles enfrentamientos.
Al momento en que se inició el reparto de África, el 90% del territorio estaba gobernado por
africanos, para 1900 la proporción se había invertido y en 1914, África se encontraba
totalmente repartida entre las potencias imperialistas, salvo por dos territorios que
permanecían independientes: Liberia y Etiopia.

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