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TP Nº3 - Comunicación Popular (2022)

Unidad 2 y Unidad 3 DIMENSIONES DE EXPERIENCIAS DE LA COMUNICACIÓN POPULAR, ALTERNATIVA Y COMUNITARIA. DEAFÍOS POLÍTICO INSTITUCIONAL PARA LA CONSTRUCCIÓN DE LA CIUDADANÍA COMUNICATIVA EN ÉPOCAS DE GLOBALIZACIÓN Y PANDEMIA. Unidad 2: Dimensiones y experiencias de la comunicación popular, alternativa y comunitaria. Surgimiento y desarrollo de la comunicación alternativa. Los cambios de escenarios y su impacto en las prácticas.
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TP Nº3 - Comunicación Popular (2022)

Unidad 2 y Unidad 3 DIMENSIONES DE EXPERIENCIAS DE LA COMUNICACIÓN POPULAR, ALTERNATIVA Y COMUNITARIA. DEAFÍOS POLÍTICO INSTITUCIONAL PARA LA CONSTRUCCIÓN DE LA CIUDADANÍA COMUNICATIVA EN ÉPOCAS DE GLOBALIZACIÓN Y PANDEMIA. Unidad 2: Dimensiones y experiencias de la comunicación popular, alternativa y comunitaria. Surgimiento y desarrollo de la comunicación alternativa. Los cambios de escenarios y su impacto en las prácticas.
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Universidad Nacional de Salta

Facultad de Humanidades
Licenciatura en Ciencias de la Comunicación
Cátedra de Comunicación Popular y Alternativa

Trabajo Práctico Nº 3- TRABAJO GRUPAL INTEGRADOR

Alumnas:

COPA, Veronica Rocio D.N.I.: 39.537.228


FRISOLI Azcárate, María D.N.I.: 39.895.619
SORIA, Natalia Belén L.U.: 718655

1) Según Maria Cristina Mata:


a) ¿Por qué la comunicación popular y alternativa no es una práctica,ni una
dimensión táctica e inorgánica?
b) ¿Cuáles son las deudas y lo que estamos “desaprovechando”quienes trabajamos
desde la CPA? En este sentido, ¿cuáles son los desafíos académicos?
c) Partiendo de la comunicación como un derecho humano fundamental, ¿qué
aspectos componen la figura de un nuevo comunicador mediador como profesional?
2) Elijan tres autores de esta unidad ¿ Qué obstáculos y/o problemas se enfrenta el
sector de la Comunicación Popular y alternativa? ¿Cómo se organiza el sector
frente a estas situaciones?
3) A partir de la película Tewok y el texto Rivera G., Pamela, a) identifiquen los
cambios de escenarios y su impacto en las prácticas de las comunidades.
b) Identifiquen la comunicación alternativa, popular y comunitaria y las experiencias
gráficas, radiales y audiovisuales de la comunidad.
c) Enumeren los actores y las características interculturales que identifiquen. ¿Cuál
es el aporte de la comunicación en el proceso que cuenta Laureano Segovia en el
documental? Con qué autores de la cátedra pueden vincular el documental?
Desarrollen.
4) Luego de haber escuchado el Ciclo Sonoro “Somos Raíz” ¿cómo relacionan los
conceptos que se abordan con los artículos de Natalia Vinelli?
5) Definan ciudadanía comunicativa Pensándolo desde las organizaciones, los
medios y la conectividad (elijan autores y materiales trabajados en las materia,
citarlos correctamente).
b) ¿Cómo lo leen desde los ámbitos de la urbanidad y la ruralidad?
c) ¿Reconocen estrategias de redes y articulaciones en post de la ciudadanía
comunicativa? ¿Cuáles? ¿Para qué?
Desarrollo

1- a) La comunicación Popular y Alternativa se distingue por la frase tomada de


Vinelli y Rodríguez Esperón que “El concepto (de CPA) se realiza en la práctica;
fuera de la práctica no significa nada”, en este sentido, es válido pensar y estar de
acuerdo a esta noción, pero hay otro sentido de ‘Práctica’ con el cual estamos en
desacuerdo, no hay una estructura para hacer, Comunicación Popular, uno de los
problemas que señala María Mata, es que no podemos encerrarla en un tipo
específico de modalidad, del mismo modo no podemos pensar que la Alternatividad
se dejara llevar siempre por los mismo parámetros, no hay una serie de pasos fijos
e institucionalizados, son modos espontáneos que surgen de una necesidad
buscando resolver una problemática, asentada e ignorada en una comunidad.
No es táctica por que no es que se aplican siempre las mismas estrategias,
no se trata de una composición de mecanismos militares, rígidos y faltos de
humanidad.
Ni mucho menos podemos decir que es Inorgánica, porque su base, son
precisamente sujetos vivos, son los actores, es un espacio atravesado por la
diversidad de sujetos, espacios y sucesos que brindan la diversidad por la cual se
caracteriza.

b) María Cristina Mata, nos señala una brecha importante presente en las
carreras de Comunicación, que se instala en aquellos lugares en los que la
Comunicación Popular Alternativa, está (o no) presente, y que suelen ser espacios
en los que se da por sentado el conocimiento, sin el interés de incurrir de modos en
los que podamos analizar/investigar los fundamentos, límites, métodos que validan
estos espacios en nuestros “quehaceres” cotidianos.

Los objetos de estudio de la CPA, van más allá, de analizar (y luchar en


contra de) los que gestionan los medios hegemónicos, o deshabilitan voces, temas
o lenguajes, en palabras de la autora. Es por eso que María Mata propone pensar
en tres deudas principales, las cuales son ejes de lo poco que se aprende/ pone en
práctica en las universidades, las cuales tienen problemas al validar tales prácticas y
conocimientos, otro de los problemas que resalta la autora es que tales prácticas se
desaprovecharon al intentar encasillarlas dentro de un patrón específico.
A continuación una breve descripción de aquello “desaprovechado” por los
comunicadores:
1- El diálogo como base indispensable, uno que permita la interacción que
resultan de “la alteridad, la diferencia y las distancias”, en palabras de Mata.
2- Se han dejado de lado las discucionesque giran sobre las
representaciones discursivas y sociales, esto vinculado al hecho de que de que se
reconoce la limitaciones técnicas para que todos puedan ser enunciadores de sus
posturas, esto se convierte entonces restricción social y cultural, en la que no todos
los actores con discursos públicos diversos tengan condiciones igualitarias.
3- La última pero no menos importante, es discutir, nociones que han sido
establecidas desde un sistema de producción a partir de medios masivos de los
cuales parecería que no podemos salir, sino dejaríamos de pensar ven los ,medios,
un ejemplo claro es “la agenda”, la cual se ocupa de la producción y difusión de
lógicas ,mediáticas, pero no de un agenda que se encargue de las necesidades de
una población o de los intereses que se centren en la expresividad de una
comunidad.
No podemos decir que estas tres cuestiones son las únicas problemáticas
que están presentes en la Comunicación Popular y Alternativa. Pero si son
consideradas de un peso importante y estas son las que podrían generar un cambio
en los modos de hacer y poner en práctica la Comunicación Popular y Alternativa.
En base a un Encuentro Nacional de Estudiantes de Comunicación María
comparte que uno de los principales desafíos de los comunicadores es "formar
profesionales con la capacidad de planificar, producir, e investigar políticas,
prácticas y medios que contribuyan a garantizar el ejercicio de ese derecho" (Mata
2015)
Si bien son objetivos que han empezado a cumplirse en ciertas
universidades, María sostiene que tenemos que cuestionar y modificar las nociones
naturalizadas que en muchos casos suelen hacer que los comunicadores tomen un
papel superior y dispongan del derecho a la comunicación, un derecho, el cual debe
garantizarse que pueda ser ejercido por todos.

El desafío para las instituciones universitarias es formar profesionales que


identifiquen diversidad de voces, los lugares y los modos en los cuales enuncian si
pueden o no hacerlo en el ámbito público, esto con el fin de que el comunicador sea
un mediador.
Esta es una noción que requiere reformular y repensar al comunicador,
teniendo en cuenta los escenarios donde sus capacidades son puestas a prueba y
atravesadas por las fragmentaciones de posibles de actores virtuales/ digitales
cuyos funcionamiento es impredecible.

c) Para abordar esta cuestión, es importante pensar en la comunicación


como un derecho fundamental de cada humano/comunidad, como hablamos en el
punto anterior algunas otras nociones que retoma la autora, en un primer lugar
pensar en la comunicación como derecho, es pensar en un sistema de expresión y
espacio de puesta en común , es pensar en la necesidad de entender el
conglomerado de medios comunicacionales como un campo donde hay distinciones
y conflictos en constante cruce.
Este espacio debe ser puesto en práctica con el sentido correcto de
“democracia”, el cual se enriquece de de los conflictos y los consensos, en palabras
de (Foster 2011), permitir que las tensiones se desarrollen y evitado la eliminación
de discursos, conflictivos, la cual es una estrategia de censura, es hacer
comunicación abierta para los diversos enunciadores, las carreras de comunicación
deben abocarse por empaparse de diversidad y combatir con las desigualdades
existentes en los campos de estudio/práctica.
El comunicador como mediador tiene un largo camino por delante, es un
desafío académico, y también un objetivo a realizar, que solo puede alcanzarse si
nosotros comunicadores en formación estamos dispuesto a salir de esos espacios
en los cuales no sentimos cómodos y nos adentramos en aquellos que parecen
invisibles y fuera de los límites, esto es a lo que se refiere con “los lugares
incómodos” María Mata.

2-
➢ En torno a la Comunicación Popular Natalia Vinelli menciona las numerosas
tensiones o zonas de indefinición conceptual tiene que ver con los contextos
en los que se desarrollan las experiencias y con el lugar de la práctica en la
definición y redefinición de la alternatividad. La cuestión de la multiplicación
de voces, sobre todo en los casos en que elemento de la participación
comunitaria es enfatizado, entre en tensión muchas veces con la idea de
profesionalización, que a su vez se relaciona de manera conflictiva con la
cuestión de la recepción, los códigos aprehendidos y el gusto, que
complejizan aquello que se hace a la participación de la comunidad. Hay que
tener en cuenta que es importante no caer en el resbaladizo terreno de la
idealización de las prácticas, como si estas no estuvieran insertas en una
sociedad dad y cruzadas por lógicas sociales contradictorias (de
transformación, de producción), y se redujeron simplemente a una esencia
fosilizada.
El tema de la profesionalidad, aparece como exigencia cuando se avanza en
procesos de legalización que se proyectan de manera problemática hacia los
medios, tensionándolos hacia la institucionalización. Esto último no significa que los
alternativo debe ser entendido únicamente como lo artesanal, lo marginal o lo pobre
en materia de recursos materiales y simbólicos y deba conformarse con
experimentar en la carencia. La experiencia alternativa pueda desarrollarse es
necesario entender estas exigencias como punto de llegada y no como punto de
partida, y que la invectiva popular sea parte de dicha conceptualización y no un
mero receptáculo de lo que el mercado y los especialistas definen como
profesionalidad.

Otra preocupación constante es unos de los elementos diferenciales que hacen a la


comunicación popular. En la medida que el medio alternativo se afianza entre los
grupos subalternos, es difícil no advertir la importancia de la participación
comunitaria en alguna o en todas sus instancias: desarrollo, gestión y toma de
decisiones, que a la vez están cruzados por diferentes mecanismos de
representación que las experiencias utilizan para funcionar en virtud de las
características del dispositivo y la cosmovisión de mundo de los sujetos
involucrados.
Cómo hicieron frente a estas situaciones:
Teniendo en cuenta estas zonas problemáticas, podemos afirmar que la relación
con la comunidad en términos de apertura a la participación para la organización y
la movilización, como canal de expresión y articulación de los sectores silenciados
por los medios dominantes es uno de los rasgos que hacen a estos medios. Pensar
la participación como condición sin reducirla a una receta o un conjuro, evitando su
utilización fraseológica. Entenderla como efectivización de acuerdo políticos y
marcos comunes; en tanto apertura a la realización de programas, materialización
de propuestas, formación técnica y política. La participación leída en clave de
inserción y apropiación de la experiencia por parte de colectivos y sujetos en
diferentes niveles, de acuerdo con los procesos de maduración: en el diseño de los
mensajes y la conformación de agenda, en la producción de los programas y en la
toma de decisiones.

➢ María Cristina Mata en Radio Populares, mostraba el carácter fuertemente


educativo y la ubicación preferentemente rural de las radios populares les
permitió en sus orígenes imaginar a los oyentes como un sujeto casi aislado
de cualquier forma de entretenimiento masivo y mercantil, tal como por
entonces los escolares se pensaban sólo dentro del territorio limitado por la
escuela y la familia. Pero su pronta conversión en medios comprometidos con
las necesidades y anhelos de los sectores populares y el consecuente
reconocimiento de la legitimidad de formas de vivir y comunicar propias de
esos sectores. Se produjo una tensión que atraviesa la historia de las
emisoras populares de diferentes modos y con diversa intensidad y formas de
resolución.
Esta tensión es la colisión entre la voluntad de representación y expresión genuina
de los sectores populares por parte de las emisoras y la falta de aceptación plena de
la complejidad de lo popular. Un ejemplo de esto es la Radio Pio XII está
entrecruzada con las luchas de los mineros bolivianos. Volvieron a transmitir dos
años después de ser clausurada junto a las radios mineras por el golpe militar
encabezado en 1980 por García Meza. Luego de esto sintieron que debían informar
y educar todo el día; que tenían que fortalecer las organizaciones; diseñar espacios
para que se expresaran los sindicatos, los integrantes del movimiento campesino,
los grupos que buscaban reactivar la vida política cercenada por la dictadura. Lo
cual género que parte de la audiencia optaran por escuchar otras radios porque les
resultó aburrida la programación. Esto ocurrió muchísimas veces en diferentes
emisora y circunstancias-, a unos sectores altamente politizados y concientizados o
a unas problemáticas vinculadas a la situación de dominación y las luchas para
enfrentarla. Fuera o casi totalmente fuera quedaban, en programaciones y
actividades-, los modos populares de divertirse, de soñar, de creer.

Otro debate intenso fue por la cuestión de la masividad partía aguas y las opciones
se distinguían nítidamente. O las radios -voceras de los sectores populares,
intermediarias de su voz quedaban limitadas a una suerte de medio grupal, es decir,
restringen sus estrategias de interlocución a determinados colectivos y terminaban
siendo “escuchadas por los convencidos” -como solía decirse-, o aspiraban a que la
voz de esos sectores marginados del discurso público, pero conscientes de su
situación de dominación, se expandiera alcanzando al pueblo en su conjunto, a las
grandes mayorías. En otros términos, ellas limitaban su potencialidad tecnológica en
términos de alcance, instantaneidad e incidencia, o salían a disputar audiencias
para un mensaje alternativo; para el mensaje de los nuevos enunciadores.

El sector se organizó para hacer frente a estas situaciones:


En la actualidad esos espacios de comunicación se han transformado radicalmente
y las emisoras populares se enfrentan a nuevos diseños socioculturales que motivan
crisis y redefiniciones.
Los procesos de mediatización de la sociedad -la creciente articulación de las
prácticas sociales con tecnologías de producción y obtención de información-, ubica
a la radio en un espacio de renovados hábitos y usos culturales.

La tradicional distinción entre medios informativos y recreativos estalla; se quiebran


rutinas horarias y ámbitos y modalidades de consumo; se modifican las nociones de
actualidad, fuentes, y aún las de noticiabilidad; se multiplican los enunciadores; se
asiste a la ilusión de un enjambre democrático y dialogal de hablantes sostenidos en
las redes.
En nuestro continente la concentración mediática supera los estándares permitidos
internacionalmente pero el recurso a figuras como los prosumidores parece
suficiente para cerrar la brecha entre quienes tienen el poder de la palabra pública y
quienes carecen de él.
En ese marco las emisoras vuelven a preguntarse por el sentido de su práctica,
conscientes de que no hay posibilidades de modificar el injusto orden económico,
social y político en que se desenvuelven y desarrollan su vida los sectores
populares, sin la emergencia de unas palabras, de unas voces, capaces de
interrumpir, de confrontar el discurso dominante.

➢ En el texto Futuro por pasado, regresión y simulacro, La política macrista


para las radios y televisoras no lucrativas de Segura, Linares, Longo, Vinelli,
Espada, Traversaro e Hidalgo. Visibiliza los obstáculos que enfrentaron los
medios de comunicación popular y alternativa durante la política macrista.
La sanción de la LSCA abrió la posibilidad de imaginar, proyectar y desarrollar
medios alternativos, universitarios, comunitarios, pensados sobre otras lógicas de
producción y circulación. La Ley 26522 de Servicios de Comunicación Audiovisual
(LSCA) reconoce legalmente a las entidades sin fines de lucro –asociaciones civiles,
cooperativas de trabajo, cooperativas de servicios públicos, fundaciones, etc.- como
prestadoras de servicios de radiodifusión y les reserva un tercio del espectro
radioeléctrico, establece un fondo de fomento y les otorga representación en una
institución estatal participativa de propuesta, formulación y control de políticas
públicas: el Consejo Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (COFECA).
Durante los cinco primeros años de implementación de esta ley -entre 2010 y 2015-,
se produjeron logros inéditos en la historia de la radiodifusión argentina en todos los
aspectos mencionados. El Gobierno nacional que asumió en diciembre de 2015
modificó sustancialmente el rumbo de las políticas de comunicación y las fundó
completamente sobre el paradigma mercantil (Mastrini y Becerra, 2018). Si bien se
mantuvo el reconocimiento de la legalidad de los medios del sector social como
prestadores de servicios de comunicación audiovisual y el fondo de fomento, se
registraron importantes demoras en la implementación de estas políticas.

Esto se funda en una noción restringida, anacrónica y reñida con los principios del
sistema internacional de derechos humanos sobre el papel de estos medios en una
sociedad democrática. La explicitan en el último de los “17 principios que regirán la
nueva ley de convergencia” que el 6 de julio de 2016 presentó la Comisión
Redactora de la Nueva Ley de Comunicaciones Convergentes. Este punto restringe
la definición de los medios no lucrativos a aquellos orientados a “poblaciones con
singularidad cultural, social o en representación de colectivos diversos, poblaciones
distantes o de difícil acceso”1 y reduce sus funciones a darles “voz propia” y acceso
“a la educación, el desarrollo social y la diversidad cultural y lingüística” (Loreti y
otros, 2016).

Se realizaron intimaciones, allanamientos y decomisos a emisoras sin fines de lucro


en situación de ilegalidad producto de la inacción estatal en diversas provincias
como San Luis, Salta y Buenos Aires. Durante esta etapa también se produjeron
obstaculizaciones para el desarrollo de este tipo de experiencias por parte de los
actores mediáticos comerciales dominantes en el sector, con escasa o lenta
intervención de la autoridad regulatoria.

El mecanismo de fomento (FOMECA) estuvo suspendido durante gran parte de


2016, primer año de gestión del ENACOM, debido a una auditoría solicitada por la
nueva gestión, que puso al sector bajo sospecha. Así, no se pagaron las deudas de
los fondos concursados y ganados en 2015 hasta noviembre de 2016, cuando se
saldaron solo algunas de ellas. No se llamó a nuevos concursos –correspondientes
a 2016– sino hasta octubre de ese año, por lo que los resultados y pagos se
comenzaron a realizar el año siguiente. Esta situación generó mayores demoras y
subejecuciones.

Los retrasos en los desembolsos no solo significan un obstáculo para la


planificación de las emisoras, sino que también pierden su valor durante años de
alta inflación. Los aumentos generalizados de precios no solo hicieron perder la
capacidad adquisitiva que implican los FOMECA, sino que significaron un
condicionamiento directo para el funcionamiento de las emisoras comunitarias.
A esto se suma que se desarrolló una campaña de deslegitimación pública de los
FOMECA por parte de los directivos de ENACOM desde su constitución en 2016, ya
que cuestionaron a las emisoras ganadoras y a la gestión previa que implementó los
subsidios. A partir de allí, el nuevo organismo regulador intimó con insistencia a las
emisoras por supuestas irregularidades en la rendición de los fondos logrados. Si
bien el Estado tiene el deber de controlar el uso de fondos públicos, el sinsentido de
muchas de las observaciones recibidas habla, antes que, de un control racional y
justo, de una estrategia de dilación y desprestigio que dificulta el acceso a los
fondos previstos en la ley (Kejval y otro/as, 2017).

Además del FOMECA, desde 2010 distintos organismos del Estado nacional -
Secretaría de Agricultura Familiar (SAF), Instituto Nacional de Tecnología
Agropecuaria (INTA), Comisión Nacional de Bibliotecas Populares (CONABIP),
Ministerio de Cultura y Fondo Nacional de las Artes- habían impulsado programas
que funcionaron como mecanismos de fomento de los medios comunitarios,
educativos, campesinos e indígenas, incluso cuando algunos de ellos no habían
sido pensados específicamente para el sector (Segura y otro/as, 2017). Desde 2016
casi todos estos programas fueron cerrados o reducidos y los organismos que los
promueven, degradados de categoría.

El gobierno de la alianza Cambiemos dejó de financiar el programa “Sembramos


Palabras, Cosechamos Derechos” promovido por el INTA en articulación con la SAF
que financiaba los equipos y FARCO que brindaba capacitación técnica y de gestión
a las organizaciones. El programa, que había surgido en 2014 a demanda de
productores y asociaciones campesinas, había logrado la instalación y el
fortalecimiento de 19 radios comunitarias en entornos rurales de 12 provincias
argentinas. Ese proceso desencadenó la constitución de la Red de Radios Rurales.

El sector hizo frente a esta situaciones:

Los medios de comunicación popular tuvieron que recurrir a otros programas


laborales y de desarrollo social del Estado nacional para el sostenimiento de los
medios comunitarios, alternativos y populares durante estas situaciones de
obstáculos que generó el nuevo gobierno de Cambiemos. Sin ser políticas de la
comunicación o para el sector en particular, se implementan de modo tal que
algunos proyectos comunicacionales comunitarios pudieron incluirse.

Una política estatal aprovechada por estos medios fue el programa Sistemas
Productivos Locales (SPL) que promueve Planes de Trabajo Asociativo desde 2006,
a través de la entonces Subsecretaria de la Pequeña y Mediana Empresa y
Desarrollo, y que continúa a cargo del Ministerio de Producción y Trabajo desde
2018. Este programa brinda asistencia técnica y económica para proyectos
productivos a pequeñas y medianas empresas (PyMEs), fábricas recuperadas y
cooperativas. Por eso, las emisoras organizadas en cooperativas, como Barricada
TV, Radio Gráfica o PAREStv, todas de CABA, accedieron al programa.

Además, el Programa de Trabajo Autogestionado (PTA) y el Programa de


Recuperación Productiva (REPRO) del Ministerio de Producción y Trabajo también
fueron utilizados por las emisoras organizadas en cooperativas para complementar
los salarios de sus trabajadores y trabajadoras. A partir de 2017, estos programas
se unificaron en el Ministerio de Desarrollo Social a través del “salario social
complementario” (Vinelli, 2019). Para alcanzar estos beneficios, algunos medios
como Barricada TV, PAREStv, Giramundo TV y Radio Gráfica se vieron favorecidos
por las gestiones de la rama de comunicación popular de la Confederación de
Trabajadores y Trabajadoras de la Economía Popular (CTEP).

Bibliografía utilizada:
❖ Vinelli, Natalia: “Comunicación alternativa: ni dogma ni pureza, conflicto”. En
Actas del XVI Congreso de REDCOM “Nuevas configuraciones de la cultura
en lenguajes, representaciones y relatos”. Red de Carreras de Comunicación
Social y Periodismo de la Argentina y Universidad Nacional de La Matanza.
San Justo, 14 al 16 de agosto de 2014.
❖ Mata, María Cristina: “Radios populares: aportes para pensar la
comunicación”, en Revista Argentina de Comunicación Nº 10. Federación
Argentina de Carreras de Comunicación Social, 2019: 171-204
❖ Segura, María Soledad, Linares, Alejandro, Longo, Verónica, Vinelli, Natalia,
Espada, Agustín, Traversaro, Natalia e Hidalgo, Ana Laura: “Regresión y
simulacro. La política macrista para radios y televisoras no lucrativas”, en
Loreti, Damián, de Charras, Diego, Lozano, Luis y Baladrón, Mariela
(editores): Futuro por pasado. Regresión de derechos en las políticas de
comunicación del gobierno de Mauricio Macri. Ciudad Autónoma de Buenos
Aires, Carrera de Ciencias de la Comunicación, Universidad de Buenos Aires,
Instituto de Estudios de América Latina y el Caribe-IEALC, 2020: 81-97

3.A.
Los cambios de escenarios que se pueden observar en Tewok junto con el texto
de Rivera G. son 3 o 4. Un primer cambio de escenario, es cuando en la reforma
constitucional de 1994 se les otorga derechos a las comunidades originarias y
Carlos Miülers , junto con Ricardo Bilma y algunas organizaciones como Lhaka
Honhat, buscan la forma de que estas comunidades se enteren de sus nuevos
derechos.

Luego, en Misión La Paz, junto con Laureano Segovia (originario Wichi), comienzan
a desarrollar la idea de retratar la historia de la comunidad Wichi desde su propia
visión. Para ello necesitaban fondos económicos. (2010)
Y aquí nace el tercer escenario, en 2016, con un cambio de gestión y con las
políticas neoliberales, la idea de ser asistidos por el estado nacional a través del
INCA, se derrumba por completo.

Esto no fue motivo suficiente para dejar caer el proyecto, ya que es la convicción y
la decisión de los autores del documental, las que los llevan a adentrarse en esta
comunidad Wichi y realizar el documental Tewok, el cual fue estrenado en 2020.

Estos escenarios produjeron un impacto importante en las comunidades Wichi


porque se generó un contacto entre dos culturas diferentes. Por medio del respeto
lograron realizar acciones que les permitieron comunicar e informar, no solo lo
atinente a los derechos adquiridos para esta comunidad, si no también permitirles a
través de herramientas como la escritura, la fotografía, el video y los audios, contar
su historia desde su propia lengua permitiendo ser entendida.

B.

Podemos identificar una comunicación alternativa popular y comunitaria en este


documental. El hecho de que el documental este hablado en Wichi, siendo la
historia contada por ellos y no intervenida desde algún medio hegemónico, nos está
presentando una alternativa popular porque la realiza el mismo pueblo. Comunitaria
porque se les brindaron herramientas tecnológicas que les permitieron, por ejemplo,
recuperar archivos orales que contaban su historia de vida, subtitulando el idioma
original por medio de traductores bilingües que permitía que su historia se
entendiera por nosotros que no hablábamos Wichi. Las cámaras que filmaban y
fotografiaban en su lugar original a su gente son muestra también del aspecto
comunitario del documental.

C.

Los actores que podemos identificar en este documental intercultural son:

Actores políticos: los que realizaron la reforma constitucional

Actores sociales: organizaciones que se sumaron para informar y colaborar con la


comunidad, los creadores del documental, los miembros de la comunidad, etc.

Decimos interculturalidad porque convivieron dos culturas diferentes, a través de


una simbiosis entre la Comunidad Wichi y los desarrolladores de Tewok que
permitió desarrollar este film. Así, a modo de ejemplo, el contacto de Carlos
Miülers y Ricardo Bilma con el originario Wichi Laureano Segovia, proporcionó la
posibilidad de recuperar archivos históricos de la comunidad, incluso de personas
que ya no se encontraban vivas, rescatando audios que fueron grabados en lengua
Wichi.

Podemos relacionar a Omar Rincón, en su libro “Culturas Bastardas”, puesto que


él habla de producir desde uno mismo, con la expresión de uno mismo para hacerse
visible desde la propia voz y estética, en conjunto con otros de forma colectiva. En
este documental se connota esto, porque es desde los propios Wichis, su voz la que
cuenta y produce de forma colectiva con otros, y a la vez se los hace estrellas en
sus propias pantallas. Esto no sería posible si no se hubiera producido una
interacción y una intención de crear en conjunto, este documental.

4- Natalia Vinelli en su texto Nuevos escenarios de la comunicación de la


comunicación Alternativa en lo que va del Siglo XXI aborda nociones interesantes
para relacionar con Somos Raíz, trabajo realizado por la Mesa de Comunicación
Popular de Salta y Jujuy.
Si bien Natalia nos habla de la Alternatividad en un contexto de dictadura
Militar, tomaremos esta noción de “Recuperar la palabra Negada”, el trabajo de la
mesa de Comunicación Popular, en primer lugar, busca ser un medio de expresión
de sectores descuidados, por el Estado, limitados por las desigualdades, y que
constantemente están en lucha con las grandes empresas monopólicas, que se
instalan a la cabeza. Los actores centrales de Somos Raíz, son las comunidades
Indígenas, las comunidades productoras campesinas, las mujeres, el colectivo
LGBT+, estos sectores han sido discriminados y sesgados durante décadas, somos
Raíz viene a reivindicar y deconstruir nociones sumamente discriminatorias creadas
y reproducidas por la sociedad patriarcal y monopólica. Esta experiencia busca
reunir diversos testimonios, con el objetivo de contraponerse a la figura del Estado,
Natalia habla de la Alternatividad como Punto de Encuentro, son lugares de
Resistencias.
En el apartado de “Política y Comunicación en el cambio de Milenio” Natalia
distingue dos momentos importantes que fueron claves para repensar la
comunicación Alternativa, la primera es en el cambio de milenio donde se luchaba
contra la hegemonía neolibera, y segunda y muy importante para este campo, el la
el debate y posterior sanción de la Ley 26.522 de Servicio de Comunicación
Audiovisual, es aquí donde encontramos esta relación con las patronales
agropecuarias, citando a la locutora de Somos Raíz Podcast: capítulo 6 | Soberanía
y radios comunitarias, minuto 09:42 “En gran parte la ley de Servicios de
Comunicación Audiovisual habilitó a que algo que ya venía ocurriendo hace muchas
décadas se vuelva legal, que era que medios sin fines de lucro de organizaciones y
colectivos de todo el territorio nacional, puedan efectivamente construir sus medios
para sus comunidades” este apartado da cuenta de la desigualdad que había (y
hay) en torno a la creación, difusión de contenidos de interés para estas
comunidades, indígenas/ campesinas.
Natalia comenta que la alternatividad fue prevista como un medio opuesto a
la concentración, un vehículo de expresión como pluralidad de voces, como
resultado se crearon medios comunitarios dispuestos a abarcar temas que los
medios convencionales monopolizados no tenían en su agenda de interés, pero que
sí son del interés de muchos.
Otras ideas de interés de la misma autora pero de su trabajo, “Comunicación
alternativa: Ni dogmas, ni pureza, conflicto”, tiene que ver con que Natalia reconoce
a la alternatividad como un espacio cruzado por tensiones, relacionado con
tradiciones, los aportes escuchados por diversos actores de Somos Raíz dejan en
claro algunas de las tradiciones importantes para ellos, (Soberanía de las semillas),
como así también los espacios en los que se llevan a cabo (Soberanía del
Territorio), este trabajo nos permite pensar en la “Otra comunicación”, a la que hace
referencia la autora, una profundamente liga al término “sin fines de lucro”, que está
justamente en desigualdad con otros medios/empresas, pero ahí es donde reside su
esencia de Alternativo.
Para cerrar, Natalia comenta que la Comunicación Alternativa está
atravesada por la práctica y también por momentos de reflexión, esto lo
encontramos reflejado en los distintas entregas de Somos Raíz, donde los actores
no hablan de un trabajo o solo del medio por el cual “viven” o más bien sobreviven,
sino que son sus tradiciones, creencias, no solo las de un individuo, sino que
pertenecen a comunidades ancestrales que no han perdido ni contaminado sus
raíces, que luchan contra los procesos de dominación por parte de monopolios y
grandes productores.

5-
Ciudadanía Comunicativa
Mata sostiene que la ciudadanía comunicativa es y la entiende como el
reconocimiento de la capacidad de ser sujeto de derecho y demanda en el terreno
de la comunicación pública y el ejercicio de ese derecho. La cual remite
necesariamente a los derechos civiles, jurídicamente consagrados por diversos
instrumentos de los estados como leyes, decretos, etc. Pero excede la dimensión
jurídica e involucra dimensiones sociales, culturales, económicas, políticas y
comunicacionales reconociendo conflictos y disputas de intereses. Es decir, se
vincula con prácticas que garanticen el derecho en el campo especifico de la
comunicación “el ejercicio autónomo del derecho a comunicar, es decir a poner en
común”.
Ciudadanía Comunicativa desde las organizaciones
Clemencia Rodríguez sostiene que los nuevos movimientos sociales y
organizaciones entienden el poder, la resistencia y el cambio social están vinculadas
con cuestiones reconocimiento, identidad, voz, agencia y narración, como elemento
clave de la agencia política. A partir de este enfoque, el poder del subalterno se
basa en la capacidad colectiva de articular una visión de futuro expresada a través
de una voz lo suficientemente fuerte como para formar parte de la esfera pública y
ganar espacio y poder político. En otras palabras, los nuevos movimientos sociales
(por ejemplo, indígenas, feminismo, ambientalismo) son identidades colectivas con
fuerte presencia en la esfera pública, que pueden articular claramente nociones de
sí mismos y propuestas para construir comunidad. Estas organizaciones son
prácticas de comunicación en las que hombres, mujeres, jóvenes y niñas/os
aprenden a manipular sus propios lenguajes, códigos, signos y símbolos,
apoderándose de la capacidad para nombrar el mundo en sus propios términos. Son
los que desencadenan procesos que permiten a los individuos y a las comunidades
volver a codificar sus identidades y sus entornos.
La ciudadanía comunicativa en las organizaciones son las tecnologías mediáticas
para reestructurar las identidades en subjetividades empoderadas fuertemente
conectadas con las culturas locales e impulsadas por utopías propias bien definidas.
Son los medios que utilizan los/as ciudadana/os para activar procesos de
comunicación que moldean sus comunidades locales. Estas se concentran en los
procesos de empoderamiento, concientización y fragmentación del poder que
resultan cuando hombres, mujeres y niñas/os reclaman el acceso a sus propios
medios.
Ciudadanía Comunicativa desde los medios
El término de medios ciudadanos se refiere a aquellos medios alternativos,
comunitarios o participativos que facilitan, se desencadenan y mantienen procesos
de construcción de ciudadanía, es el sentido que Chantal Mouffe le da al término.
El cual es tomado por Clemencia Rodríguez donde plantea los medios ciudadanos
aquellos que se centran en entender los medios como tecnologías que permiten a
las personas intervenir en lo simbólico. El gran potencial de los medios como
tecnologías está en su capacidad para facilitar la apropiación de los lenguajes
propios para nombrar el mundo, para que las comunidades narran sus identidades y
expresen sus propias visiones y versiones de futuro. Los medios ciudadanos son
entonces aquellos medios que facilitan que las personas y las comunidades
construyan su ciudadanía en el día a día.
Ciudadanía Comunicativa desde la conectividad
María Cristina Mata sostiene que la ciudadanía comunicativa desde la conectividad
es tener las posibilidades de utilizar instrumentos para generar conocimientos
pertinentes y situado que fortalezca la voz ciudadana, sus demandas y propuestas.
La manifestación y fortalecimiento de la ciudadanía requiere de un cada vez más
denso trabajo en la producción de información relevante acerca de las causas de las
múltiples exclusiones y de la intolerancia y la represión de las diferencias que
caracterizan nuestro tiempo. Requiere de un proceso creciente de informatización
que recupere el saber vivido y le permita nutrirse de los conocimientos inaccesibles
imprescindibles para imaginar nuevos órdenes económicos, políticos y culturales.
Las radios populares tienen a su disposición un conjunto de herramientas
tecnológicas de las que carecían en otras épocas.
B-
Omar Rincón propone la ciudadanía comunicativa desde los ámbitos de urbanidad y
ruralidad, a partir de ir a los territorios. Esto nos permitirá comprender que la vida si
puede ser de otros modos volver las miradas hacia lo pequeño, lo propio, lo vital,
para encontrar que las comunidades están gestionando su destino a través de
prácticas que transforman y crean calidad de vida en y desde sus saberes. Con esto
nos propone escuchar a les ciudadanes de la ruralidad y así pasar de la ciudadanía
del miedo a la ciudadanía de la escucha.
C- Se reconocen estrategias de redes y articulaciones en post de la ciudadanía
comunicativa como la organización colectiva de la Mesa de Comunicación Popular
de Salta y Jujuy que surgió con el objetivo de acompañar iniciativas de
comunicación en los territorios, preferentemente rurales; y, con ello, fortalecer la
articulación con organismos públicos para una llegada efectiva de las políticas
públicas.

Luego de tres años de sancionada la ley, se impulsó la creación de este espacio,


que se convirtió en una organización y un campo intersectorial que articula y trabaja
por el derecho a la comunicación en cualquier soporte, medio y territorio.
Actualmente está integrada por diferentes organismos estatales, entre los que se
encuentran el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), la Secretaría
de Agricultura Familiar, Campesino e Indígena (SAFCI), el Parque Nacional El Rey,
junto a las universidades públicas de Salta y Jujuy y organizaciones sociales que
acompañan e impulsan diversas experiencias de comunicación popular, tales como
Wayruro Comunicación Popular y militantes/trabajadorxs del campo de la
comunicación.

La Mesa busca poner en discusión, a la par de otros actores, los alcances del
derecho a la comunicación y su condición popular. Es por eso que la Mesa, no sólo
se convirtió en un espacio que reúne y articula con experiencias de comunicación
popular, sino que supo convertirse en un actor legítimo para el debate sobre el
derecho a la comunicación en el norte argentino, y con ello, llegar a dar discusiones
nacionales e internacionales.

De esta manera, se ofrece como espacio para compartir entre organizaciones


diversas esas acciones, y así, posibilitar la organización comunitaria, el encuentro,
la puesta en común y la proyección de escenarios conjuntos. El aspecto de
construcción de agenda colectiva a partir de los Encuentros de Comunicación y
Ruralidad, como acción anual de la Mesa, se inscribe en esa vocación de futuro
(transformado, transformador), que marca una configuración político comunicacional
que se sostiene desde 2012.

María Cristina Mata reconoce que nunca se detuvieron las articulaciones y los
tejidos entre las universidades y las prácticas de comunicación popular, como las de
Jujuy, Salta y Tucumán que diseñaron propuestas curriculares que fortalecen el
abordaje de estas incomodidades y plantean las articulaciones académicas con
prácticas populares de comunicación, donde las organizaciones y sus medios,
adquieren un protagonismo central. En este contexto, la comunicación popular ha
expresado su potencial político-cultural alcanzado por emisoras populares y
comunitarias y las innumerables prácticas de comunicación oral-grupal, teatrales,
gráficas e incluso audiovisuales que han existido y existen (Mata, 2019: 176)

Bibliografía utilizada:
❖ Müller, Ana y Agüero, María Laura: “Incomodar desde lo popular. María
Cristina Mata y la comunicación en América Latina”, en Rodríguez,
Clemencia, Magallanes Blanco, Claudia, Marroquín Parducci, Amparo y
Rincón, Omar (editorxs): Mujeres de la Comunicación. Bogotá, Fundación
Friedrich Ebert, 2020: 89-100.
❖ Mata, María Cristina: “Radios populares: aportes para pensar la
comunicación”, en Revista Argentina de Comunicación Nº 10. Federación
Argentina de Carreras de Comunicación Social, 2019: 171-204
❖ Rincón, Omar: “Prólogo. Inventar la vida en otros modos”, en Müller, Ana
(editora): No hay puntada sin hilo. Memorias de los aprendizajes de los
encuentros de comunicación y ruralidad.Salta,Ediciones de la Mesa, 2019: 6-
8
❖ Burgos, Ramón, Müller, Ana, López, Maira Silvana, Corvalán,Elena de la
Cruz y Velázquez, Abigail Fernanda: “Una experiencia en forma de Mesa:
encuentros, radios, conectividad y otras herramientas para construir una
mesa de comunicación popular. Análisis de los procesos de organización de
la Mesa de Comunicación Popular de Salta y Jujuy (Argentina)”. En 9°
Conferencia Latinoamericana y Caribeña de Ciencias Sociales “Tramas de
las desigualdades en América Latina y el Caribe.Saberes, luchas y
transformaciones”. UNAM-CLACSO, 2022

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