Los Deshabitados

Marcelo Quiroga Santa Cruz

Capítulo 1

El padre agustino, era un hombre cura que tenía 60 años, estaba sentado en su
sillón recuerda el pasado.

Cuestiona su realidad de su manera decepcionante preguntando él porque de sus

decisiones que lo trajeron hasta el punto.

Cada mañana escucha las confesiones absurdas que la gente pertenecía

denominar Pecados cometidos de repente repente escucho al sacristán que lo
llamaba para realizar una confesión para el algunos confesiones le parecían
absurdas, consideraba que las más mínima cosa, las personas lo agrandaban
bastante. Recuerda aquel día en el que se le convirtió en cura, se volvió a
preguntar por qué se había convertido en sacerdote, muchas ideas y
pensamientos lo confunden , recuerda a su familia, su humilde hogar, su madre,
su tio, su hermano fallecido, hasta que de pronto un estruendoso ruido lo despierta
que aquellos pensamientos que tenía, era el ruido del cierre de una puerta ya eran
las 8 30.

Capítulo 2

El sacristán Zambrana recibió un Fernando Durcot, que quería realizar una visita
nocturna del padre Justiniano. Al entrar a la habitación no logro percatarse de que
del rostro del padre corrían lágrimas. Iniciaron una conversación Durcot pregunto
al padre si se encontraba bien pero este desvío la respuesta. De pronto ambos
empezaron a hablar y comentar por qué surgió la iniciativa de ser un padre y un
escritor. Por su parte Fernando Durcot, hombre de 35 años mostraba una
perspectiva acerca de lo que creía que eran los sacerdotes por otro lado el padre
Justiniano criticaba a los escritores, los consideraba hipócritas. Ambos molestos,
quedaron un momento en silencia Seguidamente volvieron a conversar
tranquilamente, el padre menciono que se encontraba triste y nostálgica, que
todo eso le aturdía. Mientras una parte de Fernando mostraba atención en lo que
lo decían, la otra estaba preocupada por siu cita con María. El padre al percatarse
de esto se despidió.
Capítulo 3

Fernando Durcot se encontraba en la calle de septiembre, iba caminando. Vio a un

mendigo, pero no le dio nada porque dijo que eras mas caritativo al no darle, ya
que el mendigo de seguro sentía mucha vergüenza de ser lo que era, por lo tanto
no estaba siendo egoísta. Más adelante debía cruzar la calle no sabía si a lado
izquierdo o derecho.

Pensó y dijo que iría por donde de aparezca alguien. Alado derecho apareció un
perro blanco y al otro lado un borracho, por lo que dijo el que orine primero. El
perro no hizo así que fue a lado derecho, de repente se encontró con el uro
blanco de un posible colegio fiscal pensaba en las palabras del padre Justiniano,
que había hecho el con su vida era era mayor y no tenía los logros de un albañil o
de incluso un ladrón. Al caminar percato que el muro del cole tenía dibujado con
carbón obscenidades se preguntaba, como niños tan pequeños hacían esto, seria
porque estaba en un barrio popular o porque tenían una curiosidad y dibujaron su
misma naturaleza, el trataba de dar explicaciones así pasaba caminando hasta
que termino este muto y nuevamente sus pensamientos estaban en el encuentro
que tendrían con María.

Capítulo 4

Fernando y María bacarot se encontraron, ella estaba sentada en el parque de los

cerezos con un libro en sus piernas, ella no lo creía solo tenía de adorno se
llamaba la gran libertad. Durcot se preguntó si estaba molesta pero ella no
respondió su conversación ella muy tétrica. De repente Durcot percato el libro que
tenía María, le dijo si era uno de política a lo que ella respondio con intriga, no
concretamente, al final tenían un tema de conversación todo iba bien hasta que
Drucot se dio cuenta que el autor era una mujer, eso no fue de su agrado.

Ambos estaban sumidos en sus pensamientos, sin decir palabra alguna, hasta
que María volteo su cabeza esperando que Durcot haga lo mismo, para asi poder
recibir un beso. Pero no Durcot se levantó y ofreció caminar, María estaba
avergonzada ya que no tenía la misma Perspectiva del amor.

Capítulo 5

María ya estaba en su casa iba a darse una ducha recordó la cortante despedida
que tuvo con Durcot. A estar en su baño imagino una escena en la que ella estaba
muerta, pensaba si sus vecinos notarían su ausencia o como Durcot se enteraría
de tan trágico echo.

Tal vez a través del titular de un periódico, acaso el iría corriendo a su casa, se
lamentaría reconocería el amor que sentía por ella todo eso lo imagino. Mientras
tanto en esa misma escena había periodistas, policías, forenses que trataban de
construir el hecho. María regreso de ese sueño, se sentía avergonzada y
humillada, por lo que rompió el llanto por más que intentaba retener sus lágrimas,
estas no dejaban de salir. Pensaba que ya le había llegado la vejez, el hecho
vergonzoso del parque era producto de los temores que tenía. El fin después de
haber llorado y pensado tanto la tranquilidad llego a ella

Capítulo 6

Durcot subió a un transporte en el que el conductor le jugo una broma le pidió más
pasaje y este se lo dio sin pensar. De esta manera es que todos los pasajeros se
burlaban de él, uno más que otros.

Mientras buscaba un asiento y veía la sonrisa de los rostros en los pasajeros

recordó una de sus mayores vergüenzas, como cuando era niño su madre salió, el
entro a su habitación y se puso uno de los trajes de ella mientras se veía en el
espejo su madre volvió lo vio él se escondió entre la ropa y ella fingió en no
haberle visto. Al seguir caminando dentro del trasporte pertacato que un hombre
muy nervioso incomodaba a una mujer, cuando este Bajo Durcot se sintió a lado
de ella ambos decían las ventajas que tuvo el hecho de que el hombre nervosos
haya bajado del auto y así continuaron una discreta charla.

Capítulo 7

Durcot y aquella mujer que conoció en el transporte se dirigieron a una habitación,

ella era muy directa realizaba muchas preguntas a las que Durcot siempre decían
que si aún que no fuera así. El empezó a soltar su corbata mientras recordaba que
hace cuatro años había conocido a María.

Se quitó la camisa, se acercó aquella mujer pero reacciono pensó en María en su

aroma y en lo que ella pensaría si se enteraría de lo que él estaba haciendo,
reconocio que sentía algo por ella quería ser un nuevo hombre con el apoyo de
padre Justiniano, decidió retirarse de ese lugar. La estaba amaneciendo.
Capítulo 8

Muños de ojos gris y celeste, se encontraba sentado debajo la mesa esperando su

comida. Después caminaba por esa casa gris en la que escucho un llamado, dio
por la puerta de a poco las figuras de 2 mujeres que discutían, una se quejaba de
la terrible noche que paso ya que no podía dormir por los males estar es que
tenía.

Eran dos hermanas que se encontraban en el comedor, se servían los alimentos y

hablaban de sus condolencias, De pronto llego María la enferma. Teresa una de
sus hermanas corrió a traer las inyecciones mientras que Flor abrió la puerta. Al
llegar con las inyecciones, María se los aplico a Flor que se encontraba mal del
brazo, ella no era cuidadosa no cambiaba sus vendas los cual evitaba su pronta
recuperación.

Mientras Teresa salió de la habitación recordó a su difunto esposo Manuel que

había fallecido hace 14 años y así muchas cosas vinieron a su mente. Al terminar
todo este proceso María se retiró de la casa acompañada de ambas hermanas
hasta la puerta.

Capítulo 9

El padre Justiniano estaba pensativo pensaba en una respuesta idónea por Flor.
Ella lo estaba esperando. Por otro lado Flor estaba desesperada, tenía ya sesenta
ocho años, no sabía el sentido de su vida estaba enferma, muchas cosas pasaban
por su mente.

Finalmente el padre le dice que le hizo falta un marido y ellas altero y dijo que era
cierto, que su hermana se se casó y tuvo un hijo pero su esposo e hijo fallecieron
pero que ella por lo menos tiene eso, En cambio ella nada no tiene por quien o
para quien vivir. Una terrible falta de sentido en su vida, un vacio inmenso ya le
aburría la soledad de su habitación el hecho de estar sentada de parecer una
estatua todo eso le aturdía.

Capítulo 10

En un internado uno de las personas que estaba de turno pensaba que los
internos siempre se portaban mejor cuando las vacacione estaban por llegar. Al
mismo tiempo los jóvenes internos se encontraban limpiando cambiando el
periodo y otro comparando su anatomía y hombría.
Algunos se percataron que el cartero llego entre ellos Pablo Pardo que se
escabullido entre sus compañeros logro engañar al portero y vio como caían
tantas cartas con tantas sorpresas ellas entre ellas la de su madre. Al tomarla vio
que iba dirigida al director del establecimiento por lo que se supone que decía en
las vacaciones las iría a pasar con sus tías abuelas.

Regresando con sus compañeros el director ingreso donde estaban Pablo ya

imaginaba que era por él, por la escapada que se dio. Y muy ciertamente el
director lo llamo y confirmo que las vacaciones en las pasaría con sus tias abuelas
al igual que el año anterior. El director se retiró mientras murmuraba cosas que
Pablo no entendía.

Capítulo 11

Ya al anochecer Pablo se encontraba en la habitación donde sus compañeros

dormían. Cuando él tenía 10npensaba que a Los 12 ya era todo un hombre
maduro.

Pero cumplió doce y esa idea se esfumo Recordaba a sus tias que eran Flor y
teresa su tía flor siempre enferma y Muños se perrito Se preguntaba qué hacían
imaginaba a Flor durmiendo y a Teresa tejiendo. De pronto recordó a Luisa una
niña de 11 años con la que salía a caminar nuevamente por las calles y encontrar
la felicidad junto a él.
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