“Año de la recuperación y consolidación de la economía peruana”
UNIVERSIDAD NACIONAL TECNOLÓGICA DE LIMA SUR
FACULTAD DE INGENIERÍA Y GESTIÓN ESCUELA PROFESIONAL DE
INGENIERÍA AMBIENTAL
Artículo: “El Objetivo en la Investigación”
Integrantes
• Pighi Hidalgo, Luis Leonardo (2115040125)
• Suarez Ima, Wesly Kiara (2115110125)
Trabajo presentado para el curso:
Tesis 1
Dirigido por el profesor:
MELGAREJO QUIJANDRIA MIGUEL ANGEl
2025
Caso práctico Nro. 3:
1. ¿Cuál es la relación entre el Planteamiento del Problema y el Objetivo de
Estudio?
De acuerdo a la lectura menciona que la relación entre el planteamiento del problema
y el objetivo de estudio es directa y esencial, ya que el problema identifica una situación
que necesita ser comprendida o transformada, mientras que el objetivo indica lo que se
pretende lograr para dar respuesta a dicha situación. Puesto que, los objetivos suelen
derivarse del problema planteado, pues son los que orientan el rumbo de la investigación
y permiten enfocar los esfuerzos hacia una meta concreta. En otras palabras, el
problema justifica la investigación y el objetivo la dirige.
2. ¿En qué consiste la conceptualización del objetivo de investigación?
La conceptualización del objetivo de investigación consiste en definir de manera clara,
coherente y fundamentada qué se quiere lograr con el estudio. No se trata de redactar
una frase, u oración, sino de evaluar la intención que tiene el investigador: qué desea
conocer, analizar, comprender o transformar. Este proceso implica una reflexión crítica
sobre el tipo de conocimiento que se va a construir y cómo ese conocimiento se vincula
con la problemática identificada. Además, la conceptualización exige seleccionar el
verbo adecuado que exprese con precisión la acción a desarrollar (como analizar,
describir, comparar, interpretar), así como delimitar el objeto de estudio y su contexto.
Así, el objetivo se convierte en una herramienta clave que guía todas las fases del
trabajo investigativo.
3. ¿Cuál es la relación entre los problemas secundarios y los objetivos
secundarios?
La relación entre los problemas secundario y los objetivos secundarios se relacionan
teniendo en cuenta los siguientes puntos:
1. Correspondencia uno a uno:
Cada problema secundario genera de manera directa un objetivo secundario.
Es decir, por cada sub problema planteado, se formula un objetivo específico
que busca responderlo.
2. Transformación formal:
La relación se establece mediante una transformación simple:
• El problema secundario se plantea en forma de pregunta.
• El objetivo secundario se formula como una afirmación que indica una acción
concreta que realizará el investigador para abordar esa pregunta.
3. Coherencia interna:
Esta relación asegura que toda la investigación mantenga una estructura
coherente. Los objetivos específicos no se improvisan: surgen directamente de
los subproblemas definidos, garantizando que todos los aspectos del problema
principal sean estudiados.
4. Funcionalidad investigativa:
Gracias a esta relación, los objetivos específicos guían el desarrollo de la
investigación, permiten recoger datos relevantes, estructurar el análisis, y
responder con claridad al problema general.
4. Conclusión grupal sobre el artículo científico
El artículo resalta la importancia fundamental de la correcta formulación de los objetivos dentro
del proceso investigativo. Señala que una investigación bien estructurada no puede desarrollarse
sin antes haber definido claramente sus objetivos, ya que estos son los que orientan todo el
trabajo, desde la recolección de información hasta el análisis de resultados.
Se enfatiza que existe una relación directa entre los problemas de investigación y los objetivos:
cada problema, ya sea general o específico, debe tener su respectivo objetivo como
respuesta operativa y concreta. En este sentido, los objetivos no se generan de manera
arbitraria, sino que se derivan lógicamente de los problemas planteados.
En particular, los problemas secundarios representan aspectos específicos del problema
central, y cada uno de ellos da lugar a un objetivo secundario que establece con claridad lo que
se pretende lograr en relación con ese aspecto. Esta correspondencia permite al investigador
trabajar de manera ordenada y garantizar que no se deje fuera ningún elemento importante del
fenómeno estudiado.
Además, el artículo subraya que transformar los problemas en objetivos no es solo un ejercicio
formal, sino una estrategia metodológica que facilita la planificación, ejecución y evaluación de
la investigación. Al convertir interrogantes en propósitos, el investigador puede enfocar sus
esfuerzos y definir con precisión el alcance de su estudio.
En resumen, del artículo se concluye que una buena investigación depende en gran medida de la
solidez con la que se formulen sus objetivos. Estos deben surgir como una respuesta lógica a los
problemas planteados, permitiendo así que el estudio tenga una estructura coherente, metas
claras y resultados útiles y aplicables.