El tejido conectivo, derivado del mesodermo, tiene funciones esenciales como sostén, defensa, y almacenamiento de energía y nutrientes, y se clasifica en generales y especializados. Incluye varios tipos de células como fibroblastos, adipocitos y macrófagos, y su composición abunda en sustancia intercelular que varía en forma y función. Este tejido es crucial para la estructura y función de los órganos en el cuerpo humano.