Satanás se rebeló contra Dios y fue expulsado del cielo. Usó su sabiduría corrompida para engañar a Eva en el Edén y apartarla de Dios. Ahora ataca a los humanos de tres formas: posesión, opresión e influencia, tergiversando la verdad y usando las Escrituras de manera engañosa para inducirlos a la apostasía. Se debe probar los espíritus y no creer todo lo que dicen.