El documento presenta un programa de estudios para la asignatura de lógica en la educación media superior, enfatizando la importancia de preparar a los estudiantes para enfrentar desafíos del siglo XXI a través de un currículo dinámico y pertinente. Se propone un enfoque centrado en la argumentación como herramienta clave para la vida cotidiana y el pensamiento crítico, alejándose de un modelo educativo que prioriza la memorización y fragmentación del conocimiento. La implementación de este programa busca transformar el rol del alumno en el proceso educativo, fomentando su participación activa y reflexión crítica sobre su aprendizaje.