España tiene una variedad de climas debido a su situación geográfica entre latitudes templadas del hemisferio norte y a la influencia del anticiclón de las Azores y las borrascas del frente polar. Los principales climas son el oceánico, con lluvias todo el año y temperaturas suaves; el mediterráneo, con veranos secos e inviernos suaves; el semidesértico en el sureste, con escasas lluvias; y el de alta montaña en zonas por encima de los 1000 metros, con inviern