David Ricardo analiza la teoría de las ventajas comparativas y la renta diferencial. Explica que los países deberían especializarse en la producción de los bienes en los que son más eficientes y luego intercambiarlos a través del comercio internacional, beneficiando a ambas naciones. También describe que la renta diferencial surge cuando se cultivan tierras menos fértiles, haciendo que los precios de los alimentos aumenten. Ricardo sostiene que derogar las leyes de granos e impulsar el libre comercio y la innovación