La Edad Media fue un largo período entre los siglos V y XV caracterizado por la ruralización y el dominio de la religión en Europa. En la Península Ibérica, los reinos cristianos lucharon para recuperar los territorios conquistados por los musulmanes, estableciéndose una sociedad feudal jerárquica y una cultura dominada por la iglesia aunque con influencias de las culturas cristiana, musulmana y hebrea.