La declaración de independencia de los Estados Unidos de 1776 proclamó la independencia de las trece colonias del imperio británico, fundamentándose en acusaciones contra el rey Jorge III por violar los derechos de los colonos. Establece que todos los hombres son creados iguales, con derechos inalienables a la vida, libertad y búsqueda de la felicidad, y que los gobiernos deben existir con el consentimiento de los gobernados. La guerra de independencia fue impulsada por múltiples causas, incluyendo falta de representación y tensiones económicas, culminando en la creación de un nuevo país.