El documento aborda los efectos negativos de las redes sociales en la salud mental de los jóvenes, destacando problemas como la ansiedad, depresión, mala calidad del sueño, y ciberacoso. A medida que el uso de estas plataformas ha aumentado, también lo han hecho las presiones sociales y la comparación entre jóvenes, lo que contribuye a un deterioro de su bienestar. En conclusión, aunque las redes sociales permiten la comunicación y el intercambio de información, su impacto puede ser perjudicial para la salud mental de los usuarios.