El documento evalúa la competencia digital en la educación universitaria, destacando desajustes entre las habilidades informáticas que las empresas demandan y las que adquirieron los estudiantes. Se abordan competencias clave necesarias para el éxito profesional, como habilidades organizativas y metodológicas, así como la importancia de un diseño curricular que se alinee con las necesidades del mercado laboral. Se propone un modelo pedagógico para el desarrollo de competencias digitales basado en la práctica y un aprendizaje activo para preparar a los estudiantes ante los retos de un entorno laboral en constante evolución.