Jordi Roca es el pastelero del reconocido restaurante El Celler de Can Roca. Al principio le costó trabajar con sus hermanos Joan y Josep, quienes eran sus referentes y jefes, pero actualmente tienen una buena relación. Gracias a su profesor Damián Allsop, Jordi encontró su pasión por la pastelería y desarrolló su estilo creativo. Reivindica la importancia de los postres y cree que lo último que se come es lo primero que se recuerda.