La Biblia es la Palabra de Dios según se evidencia por:
1) Las afirmaciones internas de la Biblia de que es la inspirada Palabra de Dios.
2) Las características externas como su continuidad a pesar de múltiples autores, su amplio alcance de temas y su influencia global.
3) Revela detalles sobre Dios, el hombre y el universo que sólo podrían conocerse divinamente.