Durante una conferencia en una universidad alemana a principios del siglo XX, un profesor desafió a sus estudiantes a debatir si Dios creó todo lo que existe. Un estudiante defendió que sí, pero el profesor argumentó que eso implicaría que Dios creó el mal. Otro estudiante intervino para señalar que el frío y la oscuridad no existen en sí mismos, sino que son ausencias de calor y luz, respectivamente. De manera similar, planteó que el mal no existe sino que es ausencia de bien. El