Lesiones del Manguito
Rotador
HospitalCentral Dr. Ignacio Morones Prieto
Traumatología y Ortopedia
Dra. Miriam Beatriz Solorzano López R3
Asesor: Dr. Jesús Ramírez Martínez
Epidemiología y factores de ri
esgo
• La incidencia de dolor de hombro en la población gen
eral es de alrededor de 11.2 casos por 1,000 pacient
es por año
• Es la causa principal de dolor del hombro
• La incidencia estimada de lesiones del mango rotado
r es de 3.7 por 100,000 por año con una ocurrencia
mayor durante la quinta década de vida entre los ho
mbres y en la sexta entre las mujeres.
• El problema aumenta con la ed
ad y los pacientes ancianos se
ven más afectados
• La incidencia de dolor de hom
bro en trabajadores llega a ser
de hasta 18%,3 especialmente
en trabajadores manuales cuy
a actividad laboral exige un gra
n número de repeticiones de m
ovimientos específicos y cualq
uiera de los tendones del man
go rotador puede estar afectad
o
• El más común es el supraespi
noso.
Anatomía y funciones
• Se conoce como mango rotador a un grupo de cuatro
tendones que hacen inserción común en la metafisis
proximal del húmero
• Originados de los músculos subescapulares, que se i
nsertan en la tuberosidad menor, supraespinoso, infr
aespinoso y redondo menor, que se insertan en la tu
berosidad mayor
• Su origen muscular se encuentra en la escápula
Recuerdo anatómico
Cara posterior del omóplato
Cara Anterior:
Sub-escapular, bíceps y supra- es
pinoso
El manguito de lo
s rotadores
Dessins N. Walch
Recuerdo anatómico
El espacio sub-acromial. Los rotadores. Corte de los rotadores, tal como se
presentan en la artrografía
• Función: la restricción dinámica
de la cabeza humeral y el impul
so rotacional en sinergia con la
s fuerzas generadas en el deltoi
des
• Consiguiéndose arcos de movi
miento tan amplios como 180 g
rados de flexión y abducción y
una combinación de movimient
os que llevan a una circunducci
ón de 360 grados.
• La contracción coordinada de los músculos del mang
uito rotador
• Mantiene centrada la cabeza humeral en la glenoides
a lo largo de todos los arcos de movimiento
• Jugando de esta manera un papel muy importante
• A través del concepto de compresión cóncava en el
mantenimiento de la estabilidad del hombro.
• Se hademostrado las contribuciones del manguito de
los rotadores en la estabilidad del hombro
• Permitiendo identificar una relación muy íntima con lo
s ligamentos glenohumerales y la cápsula articular
• Consiste en una mayor contracción coordinada, que
aumenta las fuerzas de compresión cuando hay may
or relajamiento de la cápsula y los ligamentos
• Se identifica al músculo supraespinoso como el más
efectivo en esta actividad.
Factores de riesgo
• La continua repetición de m
ovimientos por arriba de la c
abeza (abducción y rotación
externa) ya sea por activida
des laborales o deportivas e
s uno de los factores de ries
go más importantes para el
desarrollo de la tendinopatía
del mango rotador.
• Otros factores de riesgo que deb
en tenerse siempre presentes inc
luyen el consumo de tabaco, la o
besidad con aumento del índice
de masa corporal, hipercolesterol
emia, factores genéticos, variaci
ones anatómicas, discinesia esc
apular, inestabilidad glenohumer
al e hiperlaxitud.
Patogenia
• Hay varias hipótesis acerca del origen de la lesión de
l mango de los rotadores
• El problema se considera multifactorial y predominan
dos teorías
• La primera enfatiza en el inicio de la lesión en forma i
ntrínseca debido a una avascularidad localizada en l
a porción terminal del tendón del supraespinoso a un
centímetro de su inserción
• La primera enfatiza en el inicio de la lesión en forma i
ntrínseca debido a una avascularidad localizada en l
a porción terminal del tendón del supraespinoso a un
centímetro de su inserción
• Estudios actuales han demostrado que por lo común
la lesión inicia a 15 mm de la corredera bicipital.
• Los cambios en la estructura del tendón que han sido
postulados como promotores de las alteraciones que
llevarán al tendón a la falla mecánica final son los sig
uientes:
• 1. Aumento de matriz metaloproteinasas (MMP).
• 2. Reducción de inhibidores tisulares (TIMPs) de la (
MMP).
• 3. Apoptosis celular.
• 4. Metaplasia condroide.
• 5. Presencia de óxido nítrico sintetasa.
• Y una segunda causa extrínseca en la que la lesión s
e explica a través del atrapamiento que el tendón suf
re entre la tuberosidad mayor del húmero y el acromi
on y que con el tiempo provoca un proceso inflamato
rio seguido por uno degenerativo y llegando al punto
de ruptura espontánea.
• De esta manera, la lesión sería producida en la interf
erencia provocada por el choque del tendón contra la
s superficies óseas de dos maneras:
• Una en forma primaria por alteraciones en la forma y
contenido del conducto del supraespinoso a nivel de l
a articulación acromioclavicular o el arco acromial
• Una segunda forma consistente en el choque secund
ario a alteraciones en la función muscular o en el teji
do de soporte glenohumeral, dando como consecuen
cia una movilidad anormal y un atrapamiento.
Presentación y examen clínico
• De acuerdo con la etapa evolut
iva en la que se encuentre el p
aciente los datos más caracterí
sticos del padecimiento en ma
yor o menor intensidad son la
presencia de dolor y restricción
de la movilidad.
• La mayoría de los pacient
es acude a valoración por
haber iniciado con dolor al
gunas semanas antes de l
a entrevista inicial
• Mientras la intensidad del
mismo se ha venido incre
mentando progresivament
e
• Hay evidencia de que el dolor tiene relación directa c
on la magnitud de la lesión y la presencia de alteraci
ones capsulares tipo capsulitis adhesiva o contractur
a de la cápsula posterior y se despierta también con
movimientos específi cos de las actividades diarias c
omo peinarse, colocarse la camisa, la blusa o el sost
én y el lavado de dientes.
• El aseo corporal se difi
culta por las restriccion
es de la movilidad que
el dolor produce.
• La rotación externa es
el primer movimiento q
ue se restringe y le sig
ue la abducción.
Examen físico
• El examen clínico debe iniciar pidiendo al paciente q
ue se descubra el torso de manera que podamos obs
ervar sus movimientos con cuidado para poder identif
icar modificaciones inherentes a la presencia de dol
or o movilidad restringida.
• La observación de la simetría de la cintura escapular
y el volumen muscular, especialmente del supraespin
oso e infraespinoso puede dar datos muy importante
s de la evolución del padecimiento.
• La palpación en general
del hombro y la búsqued
a de puntos dolorosos ay
uda al explorador a identi
ficar estructuras afectada
s.
• Los arcos de movimiento
deben ser siempre medi
dos y comparados con el
contralateral para tener u
na idea clara de las pérdi
das funcionales
• La presencia de dolor y el
momento de su inicio dentr
o del arco de movimiento n
os pueden orientar acerca
del padecimiento
• La movilidad glenohumeral
y el recorrido escapular se
documentarán minuciosam
ente.
• Muchos de ellos no aqu
ejan dolor directamente
en la articulación del ho
mbro sino en el tercio
medio proximal del bra
zo de predominio en la
superfi cie posterolater
al que aumenta por las
noches e incluso les int
errumpe el sueño espo
ntáneamente.
Estudios especificos
• Los estudios radiográficos son útiles
para identificar alteraciones coexiste
ntes o signos indirectos tales como:
• Alteraciones en la forma del acromio
n
• Procesos deformantes de la articula
ción acromioclavicular
• Calcifi caciones
• Alteraciones degenerativas de la arti
culación glenohumeral
• Ascenso de la cabeza
• Las proyecciones básicas deberían incluir una radi
ografía anteroposterior y la exploración del arco ac
romial para encontrar alteraciones en el conducto d
el supraespinoso.
• Además de la documentación de la forma del ac
romion, que está directamente relacionada con l
a incidencia de lesiones del mango rotador, el á
ngulo de inclinación del acromion en relación al
plano escapular debe ser medido, ya que sus va
riaciones se relacionan también con la presenci
a de lesiones.
Ultrasonido
• El ultrasonido es una técnica apropiada para la valor
ación del estado del manguito rotadores
• Tiene una buena sensibilidad (0.84) y especificidad (
0.89) en las lesiones parciales y mejores resultados
en la valoración de lesiones totales (sensibilidad 0.96
y especifi cidad 0.93).17
• Tiene ventajas en el sentido de que puede hacerse c
omparativo si es necesario al hombro contralateral y
realizar pruebas dinámicas.
Resonancia magnética
• La resonancia magnética es usada ya sea para desc
artar lesiones del mango rotador cuando ha fallado el
tratamiento no quirúrgico o para confi rmar la sospec
ha de su existencia y clasificar la lesión con el objetiv
o también de planear el acto quirúrgico.
• La resonancia magné
tica ha demostrado u
na gran exactitud par
a la identifi cación de
rupturas completas y
una menor efi cacia e
n las lesiones incompl
etas, las cuales son
más perceptibles en a
paratos con mayor po
tencia (3.0 T).
• La artrorresonancia tien
e mayor sensibilidad y e
specifi cidad para lesion
es parciales que la reso
nancia magnética simpl
e y puede ser empleada
para la búsqueda de lesi
ones específi cas.
• La resonancia magnética tiene un valor importante e
n la toma de decisiones para el tratamiento quirúrgic
o de las lesiones del mango rotador porque podemos
establecer el grado de retracción y atrofia muscular c
on infiltración grasa, condiciones que tienen valor fun
cional pronóstico en la recuperación postquirúrgica.
Clasificación
• Es fundamental, para elegir
la mejor opción terapéutica
en las lesiones del mango r
otador, conocer su morfolog
ía, su extensión, si existe ret
racción y el grado de afecci
ón muscular que la lesión h
aya provocado.
• El tendón más comúnmente afectado es el supraespi
noso
• El progreso más notorio de la lesión es hacia la regió
n posterior
• El tendón más comúnmente afectado es el supraespi
noso y el progreso más notorio de la lesión es hacia l
a región posterior, por lo que se podría decir que
• Las lesiones posterolaterales son las segundas más f
recuentes con afección del supraespinoso y del infra
espinoso.
• La afección hacia la r
egión anterior del ma
ngo rotador es menos
frecuente e implica un
a disociación del cana
l bicipital y del subesc
apular.
• La presencia de una lesión parcial, por ejemplo, com
binada con alteraciones anatómicas en el conducto d
el supraespinoso será mejor tratada con una reparaci
ón del tendón combinada con la descompresión del e
spacio subacromial que con cualquiera de los gestos
quirúrgicos individualmente.
Tratamiento
• El tratamiento de las lesiones del mango rotador es
tá basado tanto en las características de la lesión c
omo en los factores extrínsecos que pudieran contr
ibuir en su persistencia o en una mayor afectación.
• Además de la reparaci
ón del o los tendones
dañados, es necesario
corregir los defectos a
natómicos que sean d
eterminantes en la pre
sencia de la lesión.
• En general, la reparación puede ser hecha en form
a artroscópica o por técnica mini-open de acuerdo
a la experiencia del cirujano; ambas técnicas ofrec
en resultados comparables en cuanto a solución d
el dolor y función ante la vida diaria.
• La fijación del tendón a la tuberosidad mayor en el
caso de supra espinoso e infraespinoso o a la tube
rosidad menor en el caso del subescapular puede
ser hecha con base en anclajes metálicos o absorb
ibles armados con suturas y en una o en dos filas,
o bien con suturas transóseas.
• Ambos métodos de fijación
se pueden utilizar en forma
artroscópica o en forma abi
erta ofreciendo los mismos
resultados funcionales des
pués del proceso de rehabil
itación sin ninguna diferenc
ia en el control del dolor po
stoperatorio.
Debemos tomar en cuenta en el tratamiento de las le
siones del mango rotador si ésta es
• Incompleta o completa
• No retraída o retraída
• Si es menor a o mayor de 3 cm
• Masiva
• Con o sin infiltración grasa y en qué porcentaje
• Cada una de estas variantes merece una atención
específica para su óptima resolución cuando se ha
elegido el tratamiento quirúrgico como opción.
• Las lesiones pequeñas y de corta evolución tienen
un mejor pronóstico funcional en vista de que no h
ay grandes cambios en la estructura tendinosa y s
e mantiene el funcionamiento muscular íntegro, y e
l manejo artroscópico ha demostrado ventajas sobr
e la técnica abierta.
• Las lesiones crónicas tienen más tendencia al frac
aso del tratamiento quirúrgico con un índice de fall
a que va de 35 hasta 90% de nuevas rupturas, esp
ecialmente si han desarrollado laminación o degen
eración grasa, por lo que requieren de una minucio
sa valoración y una elección quirúrgica correctas p
ara evitar las catástrofes funcionales a las que se a
rriesga a estos pacientes.
• El desarrollo de artropatía por mango rotador es la
expresión máxima del daño causado por la lesión c
ompleta y progresiva del mango rotador y el tratam
iento con el remplazo total inverso es la opción par
a estos pacientes.
• Muchos casos pueden tener mejores resultados co
n manejos no quirúrgicos que con cirugías aparent
emente heroicas en las que el benefi cio que se ob
tiene es mínimo en relación a los riesgos a que se
somete al paciente.
Tratamiento paliativo
Acromioplastia de Neer:
• Resección de la parte inferior del acro
mión para aumentar el espacio sub-acr
omial.
• Por artroscopía
• O por cirugía a cielo abierto
• El manejo postoperatorio tiene vital importancia par
a optimizar el resultado de una buena decisión quir
úrgica
• Un periodo de reposo o inmovilización de dos a tre
s semanas posterior a la cirugía es necesario
• Sólo se permiten movimient
os simples sin resistencia ni
contra gravedad, ya que la
carga cíclica tiene un efecto
nocivo sobre la fijación pro
vocando un leve aflojamient
o que puede llegar a ser det
erminante para el proceso d
e curación.
• De acuerdo al tipo de lesión
que se haya tratado y la fi r
meza conseguida en la fi ja
ción, la inmovilización podrí
a llegar a posiciones extrem
as en abducción y rotación
externa que deberán adecu
arse a cada paciente.
• Después del periodo de inmovilización o reposo,
el trabajo para conseguir movilidad completa sin
dolor y posteriormente el fortalecimiento muscula
r proporcionará el resultado óptimo en un periodo
que varía desde tres hasta seis meses después
de la cirugía.
Bibliografía
• Christopher C. Schmidt, MD, Claudius D. Jarrett, MD, Brandon T. Brow
n, MME. Management of Rotator Cuff Tears. American Society for Surg
ery of the Hand. Junio 2015.
• Tristan Juhan, Michael Stone, Omid Jalali, Will Curtis, John Prodro
mo, Alexander E. Weber, George Frederick Hatch III, Reza Omid.I
rreparable rotator cuff tears: Current treatment options Orthopedic
Reviews 2019; volume 11:8146
• M. Mustafa Gomberawalla MD, Jon K. Sekiya MD. Rotator cuff Tear an
d Glenohumeral Instability. A systematic review. The association of bon
e and Joint Surgeons. 2015.
• John W. O’Kane, MD and Brett G. Toresdahl, MD. The evidence should
er evaluation. Extremity and Joint Conditions. Volume 13 & Number 5 &
September/October 2014.
• Alexandre Lädermann, Patrick J. Denard. Massive rotator cuff tears:def
initions and treatment. Original article. International Orthoapedics. May
o 2015

Lesiones del manguito rotador

  • 1.
    Lesiones del Manguito Rotador HospitalCentralDr. Ignacio Morones Prieto Traumatología y Ortopedia Dra. Miriam Beatriz Solorzano López R3 Asesor: Dr. Jesús Ramírez Martínez
  • 2.
    Epidemiología y factoresde ri esgo • La incidencia de dolor de hombro en la población gen eral es de alrededor de 11.2 casos por 1,000 pacient es por año • Es la causa principal de dolor del hombro • La incidencia estimada de lesiones del mango rotado r es de 3.7 por 100,000 por año con una ocurrencia mayor durante la quinta década de vida entre los ho mbres y en la sexta entre las mujeres.
  • 3.
    • El problemaaumenta con la ed ad y los pacientes ancianos se ven más afectados • La incidencia de dolor de hom bro en trabajadores llega a ser de hasta 18%,3 especialmente en trabajadores manuales cuy a actividad laboral exige un gra n número de repeticiones de m ovimientos específicos y cualq uiera de los tendones del man go rotador puede estar afectad o • El más común es el supraespi noso.
  • 4.
    Anatomía y funciones •Se conoce como mango rotador a un grupo de cuatro tendones que hacen inserción común en la metafisis proximal del húmero • Originados de los músculos subescapulares, que se i nsertan en la tuberosidad menor, supraespinoso, infr aespinoso y redondo menor, que se insertan en la tu berosidad mayor • Su origen muscular se encuentra en la escápula
  • 5.
    Recuerdo anatómico Cara posteriordel omóplato Cara Anterior: Sub-escapular, bíceps y supra- es pinoso El manguito de lo s rotadores Dessins N. Walch
  • 6.
    Recuerdo anatómico El espaciosub-acromial. Los rotadores. Corte de los rotadores, tal como se presentan en la artrografía
  • 7.
    • Función: larestricción dinámica de la cabeza humeral y el impul so rotacional en sinergia con la s fuerzas generadas en el deltoi des • Consiguiéndose arcos de movi miento tan amplios como 180 g rados de flexión y abducción y una combinación de movimient os que llevan a una circunducci ón de 360 grados.
  • 8.
    • La contraccióncoordinada de los músculos del mang uito rotador • Mantiene centrada la cabeza humeral en la glenoides a lo largo de todos los arcos de movimiento • Jugando de esta manera un papel muy importante • A través del concepto de compresión cóncava en el mantenimiento de la estabilidad del hombro.
  • 9.
    • Se hademostradolas contribuciones del manguito de los rotadores en la estabilidad del hombro • Permitiendo identificar una relación muy íntima con lo s ligamentos glenohumerales y la cápsula articular • Consiste en una mayor contracción coordinada, que aumenta las fuerzas de compresión cuando hay may or relajamiento de la cápsula y los ligamentos • Se identifica al músculo supraespinoso como el más efectivo en esta actividad.
  • 10.
    Factores de riesgo •La continua repetición de m ovimientos por arriba de la c abeza (abducción y rotación externa) ya sea por activida des laborales o deportivas e s uno de los factores de ries go más importantes para el desarrollo de la tendinopatía del mango rotador.
  • 11.
    • Otros factoresde riesgo que deb en tenerse siempre presentes inc luyen el consumo de tabaco, la o besidad con aumento del índice de masa corporal, hipercolesterol emia, factores genéticos, variaci ones anatómicas, discinesia esc apular, inestabilidad glenohumer al e hiperlaxitud.
  • 12.
    Patogenia • Hay variashipótesis acerca del origen de la lesión de l mango de los rotadores • El problema se considera multifactorial y predominan dos teorías • La primera enfatiza en el inicio de la lesión en forma i ntrínseca debido a una avascularidad localizada en l a porción terminal del tendón del supraespinoso a un centímetro de su inserción
  • 13.
    • La primeraenfatiza en el inicio de la lesión en forma i ntrínseca debido a una avascularidad localizada en l a porción terminal del tendón del supraespinoso a un centímetro de su inserción • Estudios actuales han demostrado que por lo común la lesión inicia a 15 mm de la corredera bicipital.
  • 14.
    • Los cambiosen la estructura del tendón que han sido postulados como promotores de las alteraciones que llevarán al tendón a la falla mecánica final son los sig uientes: • 1. Aumento de matriz metaloproteinasas (MMP). • 2. Reducción de inhibidores tisulares (TIMPs) de la ( MMP). • 3. Apoptosis celular. • 4. Metaplasia condroide. • 5. Presencia de óxido nítrico sintetasa.
  • 15.
    • Y unasegunda causa extrínseca en la que la lesión s e explica a través del atrapamiento que el tendón suf re entre la tuberosidad mayor del húmero y el acromi on y que con el tiempo provoca un proceso inflamato rio seguido por uno degenerativo y llegando al punto de ruptura espontánea. • De esta manera, la lesión sería producida en la interf erencia provocada por el choque del tendón contra la s superficies óseas de dos maneras:
  • 16.
    • Una enforma primaria por alteraciones en la forma y contenido del conducto del supraespinoso a nivel de l a articulación acromioclavicular o el arco acromial • Una segunda forma consistente en el choque secund ario a alteraciones en la función muscular o en el teji do de soporte glenohumeral, dando como consecuen cia una movilidad anormal y un atrapamiento.
  • 17.
    Presentación y examenclínico • De acuerdo con la etapa evolut iva en la que se encuentre el p aciente los datos más caracterí sticos del padecimiento en ma yor o menor intensidad son la presencia de dolor y restricción de la movilidad.
  • 18.
    • La mayoríade los pacient es acude a valoración por haber iniciado con dolor al gunas semanas antes de l a entrevista inicial • Mientras la intensidad del mismo se ha venido incre mentando progresivament e
  • 19.
    • Hay evidenciade que el dolor tiene relación directa c on la magnitud de la lesión y la presencia de alteraci ones capsulares tipo capsulitis adhesiva o contractur a de la cápsula posterior y se despierta también con movimientos específi cos de las actividades diarias c omo peinarse, colocarse la camisa, la blusa o el sost én y el lavado de dientes.
  • 20.
    • El aseocorporal se difi culta por las restriccion es de la movilidad que el dolor produce. • La rotación externa es el primer movimiento q ue se restringe y le sig ue la abducción.
  • 21.
    Examen físico • Elexamen clínico debe iniciar pidiendo al paciente q ue se descubra el torso de manera que podamos obs ervar sus movimientos con cuidado para poder identif icar modificaciones inherentes a la presencia de dol or o movilidad restringida. • La observación de la simetría de la cintura escapular y el volumen muscular, especialmente del supraespin oso e infraespinoso puede dar datos muy importante s de la evolución del padecimiento.
  • 22.
    • La palpaciónen general del hombro y la búsqued a de puntos dolorosos ay uda al explorador a identi ficar estructuras afectada s. • Los arcos de movimiento deben ser siempre medi dos y comparados con el contralateral para tener u na idea clara de las pérdi das funcionales
  • 23.
    • La presenciade dolor y el momento de su inicio dentr o del arco de movimiento n os pueden orientar acerca del padecimiento • La movilidad glenohumeral y el recorrido escapular se documentarán minuciosam ente.
  • 24.
    • Muchos deellos no aqu ejan dolor directamente en la articulación del ho mbro sino en el tercio medio proximal del bra zo de predominio en la superfi cie posterolater al que aumenta por las noches e incluso les int errumpe el sueño espo ntáneamente.
  • 26.
    Estudios especificos • Losestudios radiográficos son útiles para identificar alteraciones coexiste ntes o signos indirectos tales como: • Alteraciones en la forma del acromio n • Procesos deformantes de la articula ción acromioclavicular • Calcifi caciones • Alteraciones degenerativas de la arti culación glenohumeral • Ascenso de la cabeza
  • 27.
    • Las proyeccionesbásicas deberían incluir una radi ografía anteroposterior y la exploración del arco ac romial para encontrar alteraciones en el conducto d el supraespinoso.
  • 28.
    • Además dela documentación de la forma del ac romion, que está directamente relacionada con l a incidencia de lesiones del mango rotador, el á ngulo de inclinación del acromion en relación al plano escapular debe ser medido, ya que sus va riaciones se relacionan también con la presenci a de lesiones.
  • 29.
    Ultrasonido • El ultrasonidoes una técnica apropiada para la valor ación del estado del manguito rotadores • Tiene una buena sensibilidad (0.84) y especificidad ( 0.89) en las lesiones parciales y mejores resultados en la valoración de lesiones totales (sensibilidad 0.96 y especifi cidad 0.93).17 • Tiene ventajas en el sentido de que puede hacerse c omparativo si es necesario al hombro contralateral y realizar pruebas dinámicas.
  • 31.
    Resonancia magnética • Laresonancia magnética es usada ya sea para desc artar lesiones del mango rotador cuando ha fallado el tratamiento no quirúrgico o para confi rmar la sospec ha de su existencia y clasificar la lesión con el objetiv o también de planear el acto quirúrgico.
  • 32.
    • La resonanciamagné tica ha demostrado u na gran exactitud par a la identifi cación de rupturas completas y una menor efi cacia e n las lesiones incompl etas, las cuales son más perceptibles en a paratos con mayor po tencia (3.0 T).
  • 33.
    • La artrorresonanciatien e mayor sensibilidad y e specifi cidad para lesion es parciales que la reso nancia magnética simpl e y puede ser empleada para la búsqueda de lesi ones específi cas.
  • 34.
    • La resonanciamagnética tiene un valor importante e n la toma de decisiones para el tratamiento quirúrgic o de las lesiones del mango rotador porque podemos establecer el grado de retracción y atrofia muscular c on infiltración grasa, condiciones que tienen valor fun cional pronóstico en la recuperación postquirúrgica.
  • 35.
  • 39.
    • Es fundamental,para elegir la mejor opción terapéutica en las lesiones del mango r otador, conocer su morfolog ía, su extensión, si existe ret racción y el grado de afecci ón muscular que la lesión h aya provocado.
  • 40.
    • El tendónmás comúnmente afectado es el supraespi noso • El progreso más notorio de la lesión es hacia la regió n posterior • El tendón más comúnmente afectado es el supraespi noso y el progreso más notorio de la lesión es hacia l a región posterior, por lo que se podría decir que • Las lesiones posterolaterales son las segundas más f recuentes con afección del supraespinoso y del infra espinoso.
  • 41.
    • La afecciónhacia la r egión anterior del ma ngo rotador es menos frecuente e implica un a disociación del cana l bicipital y del subesc apular.
  • 42.
    • La presenciade una lesión parcial, por ejemplo, com binada con alteraciones anatómicas en el conducto d el supraespinoso será mejor tratada con una reparaci ón del tendón combinada con la descompresión del e spacio subacromial que con cualquiera de los gestos quirúrgicos individualmente.
  • 43.
    Tratamiento • El tratamientode las lesiones del mango rotador es tá basado tanto en las características de la lesión c omo en los factores extrínsecos que pudieran contr ibuir en su persistencia o en una mayor afectación.
  • 44.
    • Además dela reparaci ón del o los tendones dañados, es necesario corregir los defectos a natómicos que sean d eterminantes en la pre sencia de la lesión.
  • 45.
    • En general,la reparación puede ser hecha en form a artroscópica o por técnica mini-open de acuerdo a la experiencia del cirujano; ambas técnicas ofrec en resultados comparables en cuanto a solución d el dolor y función ante la vida diaria.
  • 46.
    • La fijacióndel tendón a la tuberosidad mayor en el caso de supra espinoso e infraespinoso o a la tube rosidad menor en el caso del subescapular puede ser hecha con base en anclajes metálicos o absorb ibles armados con suturas y en una o en dos filas, o bien con suturas transóseas.
  • 47.
    • Ambos métodosde fijación se pueden utilizar en forma artroscópica o en forma abi erta ofreciendo los mismos resultados funcionales des pués del proceso de rehabil itación sin ninguna diferenc ia en el control del dolor po stoperatorio.
  • 48.
    Debemos tomar encuenta en el tratamiento de las le siones del mango rotador si ésta es • Incompleta o completa • No retraída o retraída • Si es menor a o mayor de 3 cm • Masiva • Con o sin infiltración grasa y en qué porcentaje • Cada una de estas variantes merece una atención específica para su óptima resolución cuando se ha elegido el tratamiento quirúrgico como opción.
  • 49.
    • Las lesionespequeñas y de corta evolución tienen un mejor pronóstico funcional en vista de que no h ay grandes cambios en la estructura tendinosa y s e mantiene el funcionamiento muscular íntegro, y e l manejo artroscópico ha demostrado ventajas sobr e la técnica abierta.
  • 50.
    • Las lesionescrónicas tienen más tendencia al frac aso del tratamiento quirúrgico con un índice de fall a que va de 35 hasta 90% de nuevas rupturas, esp ecialmente si han desarrollado laminación o degen eración grasa, por lo que requieren de una minucio sa valoración y una elección quirúrgica correctas p ara evitar las catástrofes funcionales a las que se a rriesga a estos pacientes.
  • 51.
    • El desarrollode artropatía por mango rotador es la expresión máxima del daño causado por la lesión c ompleta y progresiva del mango rotador y el tratam iento con el remplazo total inverso es la opción par a estos pacientes. • Muchos casos pueden tener mejores resultados co n manejos no quirúrgicos que con cirugías aparent emente heroicas en las que el benefi cio que se ob tiene es mínimo en relación a los riesgos a que se somete al paciente.
  • 52.
    Tratamiento paliativo Acromioplastia deNeer: • Resección de la parte inferior del acro mión para aumentar el espacio sub-acr omial. • Por artroscopía • O por cirugía a cielo abierto
  • 53.
    • El manejopostoperatorio tiene vital importancia par a optimizar el resultado de una buena decisión quir úrgica • Un periodo de reposo o inmovilización de dos a tre s semanas posterior a la cirugía es necesario
  • 54.
    • Sólo sepermiten movimient os simples sin resistencia ni contra gravedad, ya que la carga cíclica tiene un efecto nocivo sobre la fijación pro vocando un leve aflojamient o que puede llegar a ser det erminante para el proceso d e curación.
  • 55.
    • De acuerdoal tipo de lesión que se haya tratado y la fi r meza conseguida en la fi ja ción, la inmovilización podrí a llegar a posiciones extrem as en abducción y rotación externa que deberán adecu arse a cada paciente.
  • 56.
    • Después delperiodo de inmovilización o reposo, el trabajo para conseguir movilidad completa sin dolor y posteriormente el fortalecimiento muscula r proporcionará el resultado óptimo en un periodo que varía desde tres hasta seis meses después de la cirugía.
  • 57.
    Bibliografía • Christopher C.Schmidt, MD, Claudius D. Jarrett, MD, Brandon T. Brow n, MME. Management of Rotator Cuff Tears. American Society for Surg ery of the Hand. Junio 2015. • Tristan Juhan, Michael Stone, Omid Jalali, Will Curtis, John Prodro mo, Alexander E. Weber, George Frederick Hatch III, Reza Omid.I rreparable rotator cuff tears: Current treatment options Orthopedic Reviews 2019; volume 11:8146 • M. Mustafa Gomberawalla MD, Jon K. Sekiya MD. Rotator cuff Tear an d Glenohumeral Instability. A systematic review. The association of bon e and Joint Surgeons. 2015. • John W. O’Kane, MD and Brett G. Toresdahl, MD. The evidence should er evaluation. Extremity and Joint Conditions. Volume 13 & Number 5 & September/October 2014. • Alexandre Lädermann, Patrick J. Denard. Massive rotator cuff tears:def initions and treatment. Original article. International Orthoapedics. May o 2015