El documento describe el uso del sulfato de magnesio para el tratamiento de la preeclampsia con criterios de severidad. El sulfato de magnesio se administra por vía intravenosa e intramuscular y ha demostrado ser efectivo para prevenir convulsiones y reducir la mortalidad materna y fetal en comparación con otros anticonvulsivantes como la fenitoína o el diazepam. El sulfato de magnesio tiene el beneficio adicional de ser barato y de fácil producción, por lo que es adecuado para el cuidado de mujeres con preeclampsia