El documento habla sobre la importancia de la psicología en los entrenadores de fútbol. Señala que los entrenadores deben controlar su propia motivación y emociones para hacer mejor su trabajo. También deben enfocarse en que los jugadores se diviertan y tengan buenas sensaciones, más que en ganar o perder. Es importante que los entrenadores den elogios a los jugadores para reforzar lo que hacen bien y corrijan de forma constructiva, sin ridiculizarlos ni enfocarse sólo en las consecuencias.