Una red informática permite que ordenadores se conecten entre sí para compartir información y recursos. Una red consta de clientes, que solicitan servicios, y servidores, que proporcionan esos servicios. Existen varios tipos de redes según su alcance, tipo de conexión, relación funcional entre nodos, topología física, direccionalidad de datos, grado de autenticación y difusión requeridos, y servicios ofrecidos.