Las rocas sedimentarias se forman por la acumulación y consolidación de sedimentos transportados por el agua, el viento o los glaciares. Se clasifican como detríticas (conglomerado, arenisca, etc.) si contienen partículas, o químicas/bioquímicas (caliza, dolomita, etc.) si se forman por precipitación química o restos de organismos. Proporcionan recursos como arena, arcilla, sal y depósitos de petróleo y gas atrapados en las rocas.