Este documento analiza un salmo bíblico que consta de dos poemas con estilos y contenidos diferentes. El primer poema expresa acción de gracias por haber sido liberado de un peligro, mientras que el segundo es una súplica por ayuda divina ante una desgracia. El documento también explica cómo este salmo es referido en la Epístola a los Hebreos como la "oración de Jesús" y destaca que Dios espera los comportamientos cotidianos de las personas más que sus oraciones rituales.