El sistema nervioso se divide en central y periférico, donde el central incluye el encéfalo y la médula espinal, mientras que el periférico abarca nervios y ganglios que conectan con el cuerpo. Funcionalmente, se clasifica en somático, que regula acciones voluntarias, y autónomo, que maneja funciones involuntarias y se divide en simpático y parasimpático, los cuales tienen efectos contrapuestos en el organismo. El sistema simpático se activa en situaciones de estrés, mientras que el parasimpático promueve la relajación y el mantenimiento de funciones corporales esenciales.