Este documento discute la importancia de reconocer y respetar la diversidad lingüística y cultural de los pueblos indígenas en México. Reconoce el derecho de los niños indígenas a recibir una educación intercultural bilingüe que valore y promueva el uso de sus lenguas maternas. También establece las responsabilidades del estado mexicano para garantizar este derecho y preservar las lenguas indígenas a través de la educación, la justicia y los medios de comunicación.